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Viernes, 24 de junio de 2011   |  Número 11 Año I
El pulso
Uno de cada cinco adolescentes tiene un riesgo importante de sufrir un trastorno de estas características
Aresa lanza nuevas coberturas para atender de forma integral los Trastornos de la Conducta Alimentaria
Dentro de su apuesta por la Medicina Personalizada

Redacción. Madrid
La aseguradora de Salud de Mutua Madrileña, Aresa Salud, ha lanzado nuevas coberturas que permiten la atención integral de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), tales como la anorexia y la bulimia nerviosas o los Trastornos Alimentarios No Especificados. De esta forma, pone a disposición de sus asegurados una red asistencial especializada en el tratamiento de estas enfermedades, siguiendo con su apuesta por la Medicina Personalizada.

De izquierda a derecha, Joaquín López Gómez, director de Gestión Asistencial de Aresa; Montse Sánchez Povedano, directora de ITA y presidenta de FITA; Mercè Soley Andrés, gerente asistencial de Cataluña de Aresa; y Dr. Gustavo Faus Boronat, director asistencial de ITA.

El objetivo prioritario de estos nuevos servicios es la consecución de la autonomía del paciente, teniendo como objetivo no sólo la prevención de la enfermedad y la recuperación de la salud, sino también la rehabilitación y la reinserción de la persona en su entorno.

Los programas asistenciales se personalizan en función de las características de cada persona. De esta forma, cada paciente puede seguir un tratamiento a medida, con un trabajo terapéutico formado por sesiones de psicoterapia individual y de grupo, tratamiento psiquiátrico y médico-nutricional, tiempo de ocio organizado y talleres dedicados a tratar aspectos relacionados con la comida y la imagen corporal.

Uno de cada cinco adolescentes

Uno de cada cinco adolescentes tiene un riesgo importante de sufrir un trastorno de este tipo según el Instituto de Trastornos Alimentarios (ITA). Las edades de inicio de los TCA son cada vez más tempranas, empezando en algunos casos entre los 7 y los 9 años.

Las consecuencias de esta enfermedad afectan no sólo la esfera de la salud de la persona, sino también a otras áreas de su vida: provoca conflictos familiares, ocasiona la interrupción de los estudios, aleja a la persona de su entorno de amistades y repercute negativamente en el ámbito laboral de la persona, dificultando su mantenimiento o su inserción.

Estos nuevos servicios se desarrollan en colaboración con el Instituto de Trastornos Alimentarios (ITA), una red de recursos asistenciales especializados en trastornos de la conducta alimentaria con un planteamiento diferente, biopsicosocial y multidisciplinar.La amplia red de ITA va desde la hospitalización de 24 horas o de media-larga estancia pasando por un régimen de hospital de día, hasta la atención ambulatoria y los pisos terapéuticos.
 

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