¿Quiere recibir la Publicación de Sanidad Privada en su correo de forma gratuita?
Viernes, 19 de junio de 2015   |  Número 71
EL PULSO
POR OFTALMÓLOGOS DE INNOVA OCULAR
El Hospital La Arruzafa implanta el ojo biónico a una mujer ciega
El centro oftalmológico se convierte en uno de los pocos hospitales en realizar este procedimiento a una paciente con retinosis pigmentaria

Redacción. Córdoba
Un hito para la historia de la Medicina en Andalucía. El equipo de oftalmólogos del Hospital Innova Ocular La Arruzafa de Córdoba -perteneciente a la red de clínicas de Microcirugía Ocular de Innova Ocular-, encabezados por el director médico del centro, Juan Manuel Laborda, ha conseguido por primera vez en Andalucía implantar el ojo biónico a una mujer que llevaba más de 30 años sin poder ver como consecuencia de una patología que la dejó ciega.

Juan Manuel Laborda, director médico del Hospital Innova Ocular La Arruzafa de Córdoba, conversa con la paciente Josefa Jiménez.

La paciente, de nombre Josefa Jiménez Rodríguez, natural de Córdoba y de 62 años, perdió la visión en ambos ojos en los años 90 tras sufrir una enfermedad hereditaria y degenerativa denominada como retinosis pigmentaria.

La intervención, que se llevó a cabo el pasado 27 de abril, ha consistido en el implante, mediante acceso al globo ocular, de un dispositivo capacitado con nanotecnología y dotado de 60 electrodos que tienen como misión estimular la conexión que llega desde la retina hasta el cerebro con el objetivo de que éste reciba señales visuales que permitan subsanar la pérdida degenerativa del campo visual.

La retinosis pigmentaria está considerada como una enfermedad que acumula, por diversas circunstancias de tipo genético, una degeneración progresiva de la retina, lo que supone la pérdida gradual de los conos y bastones, las principales células que forman parte de esta estructura. Como consecuencia de la misma, la retina, capacitada para enviar imágenes al cerebro, no funcionaría, por lo que habría que estimularla mediante los chips implantados.

Implante del ojo biónico.

La intervención realizada por Juan Manuel Laborda y su equipo ha consistido en una compleja operación seccionada en una decena de procesos de cirugía donde, en primer término, se accede al globo ocular mediante disección de la conjuntiva para acceder a la parte posterior de los músculos que lo rodean y así proceder a la fijación extraocular del implante a modo de cerclaje.

Así, se lleva a efecto una vitectromía (cirugía para extraer el vítreo) y una esclerotomía (incisión en la esclerótica), que permite el acceso intraocular de una matriz de electrodos, posicionarlos en el interior del globo ocular (concretamente sobre la mácula) y explorarlos antes de proceder al cierre de las suturas.

La operación, que duró casi cinco horas, y en la que se usaron cinco tipos de vías de entrada intraocular y un instrumental específico y exclusivo para este tipo de cirugía, se interrumpe hasta en seis ocasiones, según el protocolo para realizar procesos de chequeo del implante.

Una vez realizado el implante, y tan solo una semana después de la intervención quirúrgica, la paciente queda en disposición de comenzar un proceso de entrenamiento (training fitting) que se prolonga durante dos meses para poder hacer uso del dispositivo intraocular. Este se sincroniza de manera inalámbrica con unas gafas de visión dotadas de una videocámara y una unidad de procesado de vídeo que convierte las imágenes recibidas en señales eléctricas codificadas que estimulan la retina.

Proyecto Argus II

La paciente Josefa Jiménez en el Hospital La Arruzafa.

Así las cosas, y tras un entrenamiento prolongado, el sistema, denominado proyecto Argus II y producido por la compañía Second Sight Medical Products, ayuda a la paciente a detectar diferencias entre luz y oscuridad, consiguiendo que ésta pueda identificar el movimiento y localizar objetos.

El proyecto, conocido como el primer ojo biónico del mundo y que inició su andadura en centros hospitalarios de Estados Unidos hace una década, aplica una filosofía similar a la que se efectúa con los implantes cocleares (para personas sordas), aunque su evolución adquiere otro tipo de potencial.

Argus II es consecuencia del trabajo de investigación que se desarrolla en el ámbito de la biónica, una ciencia que trata de emular lo que ocurre en la naturaleza para así desarrollar novedosos dispositivos electrónicos que sirvan en el tratamiento de enfermedades o en la mejora de algunas de nuestras capacidades.

La retinosis pigmentaria es una enfermedad ocular genética que afecta en la actualidad a más de un millón y medio de personas en todo el mundo.

Para recibir Publicación de Sanidad Privada en su correo pinche aquí
| La información que figura en esta edición digital está dirigida exclusivamente al profesional destinado a prescribir o dispensar medicamentos por lo que se requiere una formación especializada para su correcta interpretación |

© 2004 - 2024 Sanitaria 2000, S.L.U. - Todos los derechos reservados.