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Viernes, 10 de febrero de 2012   |  Número 24
editorial
El reto institucional de la descentralización

El IDIS comienza este ejercicio 2012 con una nueva estrategia relacionada con su difusión en las diecisiete comunidades autónomas. Si hace unos días hablábamos de iniciativas como la desgravación fiscal sanitaria, el barómetro sanitario o la de indicadores de salud, ahora es momento de enfatizar la importancia que tiene para todos los miembros que forman IDIS el que las diversas actividades que desarrolla el Instituto tengan su réplica en los diferentes territorios.

Los recientes informes sobre el sector de la sanidad privada y sus ‘Propuestas de Futuro’ han sido elaborados teniendo en cuenta las realidades sociales y geográficas de nuestro país. De esta forma IDIS ha tenido ya la oportunidad de presentar sus resultados en Castilla y León, Asturias, Andalucía, Comunidad Valenciana y la Comunidad Autónoma de Madrid.

El sector sanitario privado, tal y como está estructurado y vertebrado en las 17 Comunidades Autónomas, impulsa el desarrollo económico no solo del territorio donde se implanta sino al del conjunto de nuestro país y contribuye a la descarga y al ahorro del Sistema Nacional de Salud, colaborando activamente con la sanidad pública a través de diferentes mecanismos y dispositivos destinados a mejorar la accesibilidad de los pacientes a la atención sanitaria y a asegurar la continuidad de sus tratamientos, con el objetivo de poder atender la demanda de toda la población.

La aportación actual del sector sanitario privado se ha argumentado en los diferentes territorios donde se ha presentado tanto el informe IDIS ‘Aportando valor’ como el de ‘Propuestas de Futuro’ en torno a ocho grandes ejes: representa un elevado peso en el sector productivo español; libera recursos de la sanidad pública; mejora la accesibilidad a través de una amplia y variada red de centros; colabora con el sistema público mediante conciertos, concesiones y el mutualismo administrativo, entre otros; desarrolla actividad de alta complejidad a través de los más recientes avances tecnológicos; persigue la mejora continua de la calidad en la prestación asistencial; genera empleo en la sociedad española y contribuye a la formación de los profesionales sanitarios, y es un motor de avances en la investigación.

Si hay un sector emergente en los diferentes territorios sanitarios en España es el de la sanidad privada. En los últimos años, han surgido en las diferentes comunidades autónomas las redes hospitalarias de capital independiente, un fenómeno emergente y completamente novedoso que es base y sustentación sobre la que pivota el futuro.

Los expertos afirman que ya en el escenario del presente, con problemas de solvencia y endeudamiento del sistema en las diferentes regiones, comparten protagonismo tanto la sanidad pública como la privada, el fenómeno de la integración y complementariedad por el que aboga IDIS desde su constitución es la única salida para hacer frente al imparable aumento de los costes sanitarios y a las crecientes exigencias del paciente derivadas del conocimiento íntimo de la enfermedad, de la aparición de nuevas patologías, de los imparables avances tecnológicos y científicos, del aumento progresivo de la esperanza de vida, de los fenómenos migratorios y del incremento de las patologías de orden crónico que asolan a nuestra sociedad entre otros.

Estos retos requieren algunos cambios e iniciativas que ya estamos poniendo en marcha desde el sector sanitario privado. Por ejemplo, seguir reclutando a los mejores profesionales, continuar incorporando la tecnología más avanzada y de vanguardia, incrementar el número y calidad de nuestros servicios y catálogo de prestaciones, incidir en la importancia de la atención personalizada al paciente y sus familias, así como en la calidad hostelera e insistir en la importancia de conseguir los mayores y mejores estándares y ratios en materia de resultados de salud para pacientes y sus familias.

Hay datos objetivos que indican que el nuevo rumbo sanitario es una realidad y España globalmente, con un 31 por ciento, es el tercer país europeo con el gasto privado más elevado respecto al total sanitario, por delante de naciones como Alemania e Italia (con un 23 por ciento).

Por todo lo expuesto, en un entorno de sanidad transferida, el futuro se dibuja alentador para la inversión privada en los diferentes territorios por el incremento constante de demanda por parte de la población, la creciente exigencia de los pacientes, la mayor implicación de las empresas en forma de beneficios sociales para sus empleados o el impacto de que sobre el sistema tiene un paciente informado y formado a la vez. La asistencia sanitaria en definitiva se está convirtiendo en un bien de consumo sentencian y vaticinan ya algunos expertos.

El éxito de los hospitales privados va de la mano de la explosión del seguro privado y éste crece, a su vez, por la mejora del nivel de vida y de ahí procede el 60 por ciento de sus ingresos por término medio, mientras que los conciertos con los servicios de salud suponen alrededor del 20 por ciento y lo que se viene a denominar como privado puro que supone una cifra relativa o porcentual similar aproximadamente.

Las nuevas tecnologías, la innovación y el contar con los mejores profesionales, también están tirando del sector; ha habido una avalancha de avances tecnológicos incorporados a la Sanidad Privada que en las mejores manos, permiten atajar enfermedades antes inabordables, así como nuevas pruebas diagnósticas que utilizadas con el mejor criterio, contribuyen a un mejor pronóstico global y a una nueva eclosión de la medicina predictiva y preventiva.

La mejora del nivel de vida ha llevado a que una parte importante de la población aspire a unos determinados estándares durante su ingreso hospitalario o proceso de consulta médica, lo que sin duda también impacta de una forma muy positiva en la evolución del sector; así como algunos fenómenos vinculados al diferencial económico entre países de un mismo entorno.

En definitiva, la ebullición y proyección del sector en las diferentes comunidades autónomas y en su conjunto en España, va a seguir siendo una realidad a la que todos estamos invitados a protagonizar y presenciar y dicho proceso no puede ser desarrollado de otra forma que a través del desarrollo e integración de la sanidad privada dentro del devenir estratégico de nuestros sistema sanitario.

IDIS surgió hace un año y medio con el ánimo de colaborar, ayudar a construir y fomentar un sistema sanitario en nuestro país del que todos, sin excepciones, nos podamos seguir sintiendo orgullosos y satisfechos, un reto que nos incumbe sin duda a todos.

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