Viernes, 23 de septiembre de 2016 | Número 84 |
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Marta Villanueva, directora general de la Asociación Española para la Calidad (AEC) |
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“España está en la vanguardia de la calidad sanitaria” |
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Los profesionales, las instituciones y empresas sanitarias están suficientemente concienciados con la importancia de las acreditaciones |
Redacción. Madrid
Son cada vez más los centros de salud y hospitales españoles que están implantando la “cultura de la calidad” en sus instalaciones, o lo que es lo mismo, medir la excelencia y seguridad de sus profesionales y técnicas. Una cultura en la que está muy involucrado el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), cuya Acreditación QH (Quality Healthcare) va camino de su tercer aniversario. Marta Villanueva, directora general de la Asociación Española para la Calidad (AEC), desvela qué importancia ha tenido este reconocimiento para la sanidad del país y cómo ha influido en hospitales, profesionales y pacientes.
La Acreditación QH (Quality Healthcare) del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS) cumple tres años. ¿Qué repercusión ha tenido este reconocimiento en la sanidad española?
Marta Villanueva, directora general de la Asociación Española para la Calidad (AEC).
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La AEC valoró muy positivamente la iniciativa de la Fundación IDIS desde su origen, no sólo desde sus objetivos, sino también desde la seriedad y la objetividad con la que se diseñó el índice sintético.
El entorno sanitario, si hablamos de certificaciones y acreditaciones, es heterogéneo y el índice de la Fundación IDIS ofrece un grado suficiente para la comparación. La visión de la calidad en sanidad desde la perspectiva pública y privada nos pareció muy oportuna y acertada. Para nosotros, los espacios de intercambio son siempre enriquecedores, más si cabe en sectores tan sensibles y comprometidos como la salud.
Creemos que el impacto ha sido positivo pero los reconocimientos QH no han hecho más que empezar su camino. Los años, los centros reconocidos y la participación creciente de entidades públicas y privadas deben ser los indicadores más claros del impacto.
¿Cómo ha conseguido IDIS, a través de esta iniciativa, mejorar este sector?
Como recalca Manuel Vilches, director general del IDIS, reconociendo a los mejores. Es fundamental que aquellos centros, empresas o instituciones que buscan la mejora continua, que se centran en los pacientes y que innovan sean ejemplo para todos y reciban esa recompensa de reconocimiento público al compromiso. Hacer visible el compromiso y sus resultados a través de los reconocimientos QH impacta en las organizaciones, en los profesionales y en los pacientes.
¿Se han vuelto más competitivos los hospitales para certificar su calidad sanitaria? ¿Están más concienciados sobre este asunto?
Los profesionales, las instituciones y empresas sanitarias están suficientemente concienciados. No podemos olvidar que es una actividad donde el compromiso personal tiene un peso determinante. Hablamos de personas comprometidas, con vocación de servicio, obsesionados por mejorar y servir. Las certificaciones y reconocimientos son el medio para mejorar, para ser más eficientes y, desde luego, para ser más competitivos, tanto desde el plano público como desde el privado.
Los retos de la salud en nuestro país y en el mundo son muy relevantes y con un impacto profundo en la vida de los ciudadanos. La calidad es, sin duda, la mejor manera de innovar, mejorar y adaptarse al nuevo entorno.
¿En qué nivel de calidad está la sanidad de España frente a sus vecinos europeos?
No voy a decir nada nuevo pero nuestra sanidad y nuestros profesionales son una referencia a nivel internacional indiscutible e incuestionable. Desde la perspectiva calidad estamos en vanguardia. Sin embargo no podemos “dormirnos en los laureles”; al contrario, ser los mejores implica responsabilidad y compromiso sostenido en el tiempo por parte de quienes definen las estrategias a largo plazo. Desde la propiedad, la alta dirección y todos los profesionales.
Y por comunidades, ¿cuál es la que destaca por su mayor calidad en sanidad?
La AEC no es la organización que deba emitir una valoración respecto a este tema. Si puedo decir que desde la AEC nuestro empeño está en crear espacios de intercambio de buenas prácticas, experiencias, innovación, experiencia de cliente entre todo el ecosistema de la sanidad, pública y privada, para poder intercambiar experiencias, para promover la mejora, para que todos los ciudadanos de nuestro país accedan siempre a la mejor calidad en sanidad.
En la AEC estamos convencidos que la colaboración, en confianza, es el mejor camino para no tener que responder a esta pregunta y poder decir que no hay diferencias significativas en la atención sanitaria que reciben nuestros conciudadanos en cualquier parte de nuestro país.
¿Qué le falta a la sanidad del país para alcanzar la excelencia en calidad sanitaria?
La perfección no existe. No hay una meta que alcanzar. La excelencia es un camino que no tiene fin, que conlleva compromiso por parte de la alta dirección y una visión a largo plazo. Vivimos tiempos de cambio radical, por tanto el escenario es incierto, cambiante, volátil, impredecible… La cultura de la calidad es la respuesta para que nuestra sanidad, nuestras empresas sepan escuchar, adaptarse, crear, innovar, mejorar y ofrecer siempre el mejor servicio y producto.
La excelencia es vivir la calidad todos los días. Personalmente creo que el ideal de la excelencia trasciende a una empresa, a un sector. Es un ideal colectivo, que debe partir del compromiso individual, para desplegarse por toda la sociedad. La calidad invita a soñar y a comprometerse por un mundo mejor.
¿En qué repercute al paciente que su hospital cuente con este tipo de reconocimientos? ¿Y al profesional?
En primer lugar, seguridad y confianza. Cuando acudimos a un centro hospitalario, cuando buscamos atención médica vivimos uno de los episodios más angustiosos de nuestra vida. Dejamos nuestra salud y la de nuestros seres queridos en manos de extraños y debemos construir una relación de confianza rápidamente.
Saber que el hospital tiene una cultura de la calidad, que todos sus profesionales comparten esta vocación de servicio, de mejora, de entrega supone la base más solida para construir confianza. Además, más allá de nuestra necesidad médica, es una garantía de innovación, de compromiso con la comunidad, de estar centrados de manera prioritaria en el paciente. |
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