La Fundación IDIS trata de poner en valor toda la ingente aportación del sector de titularidad privada a la sanidad en España, prestando especial atención al paciente, su entorno, la sociedad en su conjunto y la extraordinaria labor que realizan todos sus profesionales.
Nuestro compromiso como organización es poner el acento en todo lo que supone el sector privado en términos de actividad, resultados de salud, calidad objetiva y percibida, seguridad, etc. fomentando la implantación de la innovación y los últimos avances científicos y tecnológicos en su más amplio sentido, sin perder de vista la aportación que realiza este sector especializado al desarrollo de nuestro país en términos de generación de riqueza, empleo de calidad, solvencia y sostenibilidad de nuestro sistema sanitario.
España es miembro de pleno derecho de la Unión Europea, con todo lo que ello supone, y hemos borrado fronteras. Por lo tanto, las organizaciones establecen sus propias estrategias dentro de este marco geográfico y económico e incluso más allá dentro del mundo globalizado en el que se mueve nuestra sociedad. Al igual que nuestras empresas se implantan y establecen estrategias y proyectos en otros países de la UE, lo mismo ocurre con empresas de otros países miembro de la Unión que deciden apostar por sectores vanguardistas, innovadores, de gran recorrido en España como es el de la salud. Debemos entender ya que la Unión Europea por fin empieza a ser una realidad, y esto es una clara prueba de ello.
En cuanto a la sanidad privada española en el marco de referencia europeo nada mejor que algunos datos para mostrar nuestra realidad: la financiación pública representó en 2014 el 69,8 por ciento del gasto sanitario total, suponiendo el gasto sanitario privado el 30,2 por ciento. En comparación con nuestro entorno, España se posiciona como uno de los países en donde el peso del gasto sanitario privado respecto al gasto sanitario total es más elevado, situándose por delante de países como Alemania (23,7 por ciento), Italia (22,6 por ciento), Francia (21,3 por ciento) o Suecia (15,9 por ciento). En términos evolutivos, el gasto sanitario privado en relación al PIB ha registrado una tendencia creciente en los últimos años, pasando del 2,2 por ciento (20.094 millones de euros) en 2005 al 2,8 por ciento del PIB (28.895 millones de euros) en 2014.
El sector sanitario privado en España representa un elevado peso en el sector productivo con 244.335 profesionales de máxima cualificación, 450 hospitales privados (que representan el 57 por ciento total de centros hospitalarios), lo que corresponde a una dotación de 51.967 camas (33 por ciento del total de camas existentes en España) y más de 2.900 centros médicos ambulatorios, con unos indicadores de resultados de salud al más alto nivel y un reconocimiento altísimo por parte de sus pacientes. Estamos en un nivel muy similar en comparación con nuestros vecinos europeos, y así lo ven ellos también por el gran número de pacientes europeos que atendemos en nuestras instituciones.
España es foco de atracción de inversores en sectores vanguardistas, como el de la salud, puesto que cuenta con todos los mimbres de credibilidad y confianza necesarios para ejercer máxima atracción, siempre y cuando seamos capaces de continuar ofreciendo marcos estables y predecibles en el ámbito económico, político y social.
Al igual que ocurre en otros segmentos concretos del entorno de la salud (laboratorios farmacéuticos, empresas de tecnología y biotecnología, empresas de servicios, etc.) es lógico pensar que se continuará avanzando en el proceso de concentración en la UE, es la tendencia que subyace en todos los sectores, una tendencia lógica en el mercado europeo, donde las cadenas hospitalarias son mucho más grandes que en España. En el ámbito asegurador, cuatro o cinco compañías acaparan entre el 75 y el 80 por ciento de las pólizas, mientras que en el ámbito de la provisión no ocurre lo mismo.
Este modelo adaptativo a los grandes retos que plantea nuestra sociedad en general es adecuado puesto que impulsa el desarrollo económico y social de nuestro país dentro del marco de la UE, estimulando además la competitividad y generando espacios de mejora continua en términos de calidad, seguridad y resultados de salud de los que se benefician fundamentalmente pacientes, profesionales y nuestra sociedad en su conjunto.
Desde la Fundación IDIS creemos que las iniciativas de concentración son un proceso habitual en sectores muy dinámicos, innovadores, avanzados, altamente especializados y con un futuro prometedor, una trayectoria directamente relacionada con el cambio de modelo económico al que asistimos que tiende a buscar el máximo nivel de eficiencia y especialización diferencial promoviendo la mejora continua de la calidad en pos de la consecución de los mejores resultados posibles. Ello exige aportar un elevado grado de competitividad que pasa a su vez por una necesaria capacidad de adaptación a los nuevos entornos y oportunidades que pueden surgir. |
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