Redacción. Madrid
El Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad no está de acuerdo con los datos publicados por el Ministerio de Sanidad. En su último comunicado, IDIS ha manifestado “su desacuerdo con la metodología utilizada”, ya que, en su opinión, “los datos comparativos relacionados con la titularidad de los centros son equívocos”.
Adolfo Fernández-Valmayor, presidente de IDIS.
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Para el instituto, “solo quienes utilizan y/o conocen ambas áreas de provisión (pública y privada) tienen la capacidad para, de forma objetiva, opinar sobre ellos”. Asimismo, asegura que “no deja de ser sorprendente que, a pesar de las múltiples cuestiones en las que se intenta comparar ambos sistemas, no hemos conseguido encontrar en el barómetro aquella en la que se pregunta al entrevistado si conoce de primera mano o es usuario de la privada para poder opinar con conocimiento de causa de la misma”.
En referencia a quienes tienen doble aseguramiento, el IDIS considera que “solo tienen capacidad de elegir entre uno de los dos sistemas de provisión los funcionarios del Estado, cuerpo jurídico y militares”, destacando que alrededor del 85 por ciento de ellos eligen la vía privada. En el caso de los usuarios en general, hasta el 86 por ciento de ellos recomendaría la sanidad privada a familiares y amigos, según el barómetro de esta institución. Por ello, IDIS quiere que “se reconozca el esfuerzo que hace el sector sanitario privado en la sanidad pública”, ya que, en su opinión, “sin la complementariedad de los servicios privados su sostenibilidad se vería más que comprometida”.
Asimismo, asegura que garantizar la mejor oferta asistencial para los ciudadanos debe ser objetivo prioritario”, independientemente de que la provisión de servicios sea pública o privada. Por eso, prosigue, requiere del empeño y trabajo conjunto de todos los agentes implicados.
“Lejos de buscar una competencia infundada, debería primar la información real a los ciudadanos sobre los beneficios de un sistema único que cuenta con una doble provisión, en el que la sanidad privada contribuye a la descarga de la sanidad pública y al ahorro de costes. La complementariedad e integración de ambos sectores deben ponerse a disposición de la sociedad para obtener los mejores resultados de salud posibles, que son los verdaderos índices que se deberían de trasladar a la población”, concluye. |