El pasado 1 de junio la Asociación Catalana de Entidades de Salud (ACES) celebró con gran éxito de asistencia la XXII cena de gala en el Hotel Eurostars Grand Marina de Barcelona.
Entre los 225 asistentes acudieron a la velada socios, empresas patrocinadoras y colaboradoras; representantes de la administración y de entidades del sector sanitario, social y empresarial como: Alfredo García, subdirector del Servicio Catalán de la Salud (CatSalut); Vicente Botella, vicepresidente de UPIMIR; Antoni Cañete, presidente de PIMEC; Josep González presidente de la Fundación PIMEC y el presidente de honor de ACES, Dr. Josep Cararach.
La bienvenida corrió a cargo de Anna Zarzosa, directora general de la patronal que agradeció a todos los asistentes su presencia y destacó en su parlamento la negociación del convenio laboral y la carencia de profesionales, hecho que refleja un escenario incierto. Asimismo, espoleó a los socios a seguir haciendo de la sanidad privada un referente
“Todos somos conscientes de que damos un excelente servicio a nuestros usuarios, con una mirada centrada en las personas, sin embargo, ante los escenarios futuros y con lo que hemos aprendido en el pasado, es necesario afrontar la nueva realidad con una mirada innovadora, transversal y contemplar con visión estratégica todo el sector para seguir siendo viables, eficientes y capaces de ofrecer, de nuevo, la calidad médica y asistencial de la que siempre hemos hecho bandera y que nos ha convertido en un referente de excelencia en el sector sanitario y social”.
A continuación, Xavier Guix, psicólogo experto en comunicación y procesos de autoconocimiento y escritor, impartió la conferencia, El primer paso para ir más lejos.
Al final de la velada, el presidente Dr. Lluís Monset, empezó su discurso con “ACES sois todos vosotros”, y puso en valor la fuerza de la asociación, defendiendo la importancia de la libre empresa, y mencionó algunos de los retos más importantes a los que se enfrenta en este momento la sociedad y el sistema sanitario en particular.
“Sin el mundo empresarial no hay ni cambio, ni progreso”, subrayó y a partir de ahí se hace imprescindible un clima social favorable a las empresas que no las estigmatice, “porque las empresas no quieren el poder, sino la libertad para desarrollar sus actividades”. Una libertad -recordó en referencia a la guerra de Ucrania- "que desgraciadamente no todo el mundo puede disfrutar ahora mismo en Europa".
A continuación entró específicamente en el ámbito sanitario, donde aseguró que la clave está “en encontrar la forma de utilizar mejor los recursos de que disponemos”. Lluís Monset señaló que, "todo el mundo pide que el estado garantice el bienestar, pero la cuestión es cómo hacerlo". En este sentido, remarcó que es necesario plantearse las preguntas adecuadas, más allá de las estructuras rígidas de los planificadores, “para realizar cambios de verdad en el sistema con el fin de que la gente pueda disfrutar de mejores servicios”.
Esta necesidad de reflexionar con auténtica libertad la hizo extensiva a todos los desafíos que ahora mismo están sobre la mesa como: la crisis del agua o el control de la inteligencia artificial. El presidente de ACES cerró su parlamento reivindicando el papel de la sociedad civil para construir un futuro mejor.