La Asociación Catalana de Entidades de Salud (ACES), patronal del sector sanitario privado está en total desacuerdo con la propuesta de la ministra de Sanidad, Mónica García que pretende prohibir a los médicos que terminan su formación como Médicos Internos Residentes (MIR) ejercer en el sector privado durante los cinco años posteriores a la finalización de su especialización.
La medida propuesta supone una restricción al libre ejercicio profesional y a la libertad laboral y tendría un impacto muy negativo para el sector de la sanidad privada ya que limitaría la contratación de nuevos especialistas agravando la escasez de profesionales médicos que ya afecta actualmente al sector. Según datos de la patronal ASPE, en los próximos 15 años, el 40% de los especialistas que trabajan en hospitales privados se jubilarán, lo que pone de manifiesto la imperiosa necesidad de nuevos profesionales para garantizar la continuidad y calidad de la atención médica. Esta limitación puede desincentivar a los nuevos médicos especialistas y fomentar su emigración a otros países donde puedan ejercer su profesión sin restricciones, lo que agravaría aún más la falta de profesionales médicos en nuestro país.
La restricción propuesta por el Ministerio afectaría a la oferta asistencial y al servicio eficiente del sector privado, incrementando las listas de espera y limitando y empeorando el acceso de los ciudadanos a los servicios médicos especializados. Además, esta situación podría generar una sobrecarga adicional al sistema público de salud ya de por sí totalmente tensionado. Por otra parte, la ministra también ha informado sobre la intención de incluir una cláusula de exclusividad en la negociación del convenio del Estatuto Marco para que los jefes de servicio, gerentes y directivos de centros públicos no puedan ejercer en los centros privados.
Para Anna Zarzosa, directora general de ACES “estas propuestas, lejos de solucionar los problemas actuales del sistema sanitario, generan nuevas dificultades que afectarán directamente a los pacientes, pero también a los profesionales y a los centros privados. Parece que el Ministerio quiera mejorar la sanidad pública a base de ir perjudicando al sector privado. A la ministra hay que recordarle que es ministra tanto de la sanidad pública como de la sanidad privada”.
Desde ACES instamos al Ministerio de Sanidad a reconsiderar estas propuestas y a abrir un diálogo constructivo con todos los agentes implicados para encontrar soluciones que garanticen tanto los derechos laborales de los profesionales médicos como la calidad de la atención sanitaria que recibe la ciudadanía.