El presidente del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), Luis Mayero, hace balance de lo que ha supuesto el 2018 para la sanidad en general, y para la sanidad privada en particular. Mayero apunta también cuáles serán los grandes retos que deberá afrontar el sector el año que viene, defendiendo la necesidad de hacer "una reforma reforma sanitaria que dote de sostenibilidad al sistema sanitario y apoye la transformación digital”. Por otro lado, el presidente de IDIS señala como una de las prioridades conseguir que el médico de la sanidad privada sea también reconocido como autoridad pública.
Luis Mayero, presidente de IDIS. |
1. ¿Qué balance hace de 2019? ¿Cree que ha sido un buen año para la sanidad privada?
El 2018 ha sido un año incierto y complejo en el ámbito de la Sanidad que ha generado inseguridad, preocupación e incertidumbre, aspectos nada halagüeños de cara a un sistema sólido, equitativo, cohesionado y garante. Para justificar esta afirmación no tenemos más que remontarnos a ejemplos como la reversión de la concesión del hospital de Alzira o la constante réplica en las diferentes comunidades autónomas de la tendencia a disminuir los diversos acuerdos de colaboración, o las iniciativas puestas en marcha en algunos territorios de incompatibilizar el ejercicio público con el privado entre otras medidas. En nuestra opinión todo ello se ha sustentado en mensajes carentes de la objetividad, el criterio y el rigor necesarios.
En relación con la sanidad de titularidad privada siendo optimistas creo que ha sido un año que se podría considerar como bueno aunque asimétrico una vez que ha continuado incrementándose el número de asegurados y de ciudadanos que utilizan los servicios que ofrece el entorno sanitario privado, se han implantado tecnologías de vanguardia que generan grandes réditos en términos de eficiencia y resultados de salud, se ha profundizado e impulsado las estrategias y políticas de mejora de la calidad así como las inherentes a la consecución de los mejores resultados de salud posibles entre otros aspectos. Dicho esto, he de añadir que el ejercicio que hemos dejado atrás ha sido probablemente asimétrico porque independientemente de lo comentado también es cierto que hay centros y profesionales que sufren de forma más directa el impacto de los diez años de crisis económica y las medidas en contra de la sanidad privada que ya he comentado y este aspecto nos debe preocupar y ocupar a todos una vez que ante los retos que ya tenemos y especialmente los que han de llegar por la deriva sociodemográfica y el cambio del perfil de la propia enfermedad (“Switch” hacia una eclosión de la cronicidad en los diferentes procesos de enfermar) la aportación de valor de todos los operadores sanitarios es imprescindible.
2. Una de las señas de IDIS es apostar por los resultados en salud, ¿seguiréis insistiendo en su importancia de cara al próximo año?
Sin duda, es parte de nuestro objetivo fundacional, mostrar a la sociedad en su conjunto la aportación de valor de la sanidad privada es una de nuestras prioridades y una buena forma de hacerlo es mostrando no solo nuestra realidad como sector sino además poniendo sobre la mesa los resultados de salud obtenidos tanto cuantitativos en base a indicadores validados de eficiencia, accesibilidad, calidad y seguridad y resolución asistencial entre otros, como cualitativos relacionados con la experiencia de paciente en todo su recorrido y contacto con el entorno asistencial de que se trate en cada caso. Es más, de cara a este año 2019 vamos a continuar incrementando el número de indicadores a evaluar, por supuesto el número de centros, incorporaremos más indicadores EIQI (European Inpatient Quality Indicators) que permitan la comparabilidad con resultados de salud de otros países de nuestro entorno y en un futuro incluso nos planteamos el hecho de que estos datos puedan estar desagregados. Por lo tanto, sin duda que esta apuesta estratégica es clave para nosotros y nuestros pacientes y profesionales. El ciudadano ha de tener toda la información a su alcance para que pueda tomar sus propias decisiones en cuanto a selección de especialista y centro asistencial en el que desea ser tratado.
3. ¿Cuáles son los principales objetivos de IDIS para 2019?
Podemos englobarlos en cuatro áreas sinérgicas y complementarias, sin orden de prelación, uno de los objetivos que se plantea año tras año desde la constitución de la Fundación es el hecho de aportar valor a través del análisis exhaustivo, técnico y profesional de nuestra realidad y de la del sector sanitario y sociosanitario, generando datos que reflejen la enorme relevancia del entorno de aseguramiento y provisión de titularidad privada y del emprendimiento privado en sanidad.
Para nosotros como organización de referencia en el sector es imprescindible modular el debate sanitario en torno al paciente como eje fundamental del sistema a la vez que saber conectar y trascender más si cabe con él y su entorno, con el ciudadano, con la sociedad en su conjunto y con el profesional sanitario aportando transparencia en los datos y objetividad en las informaciones.
También debemos trabajar conjuntamente con el propio sistema público de salud, con las organizaciones colegiales, las sociedades científicas y las organizaciones que agrupan a las diferentes asociaciones de pacientes en pos de una mejora de la atención sanitaria y sociosanitaria que redunde en resultados.
Y por último debemos de tratar de impulsar una reforma necesaria de nuestro sistema, tratando de dotarlo de mayor solvencia y sostenibilidad, procurando un pacto inclusivo a la vez que trabajar por la transformación digital y la innovación una vez que son claves esenciales de desarrollo.
4. ¿Y en cuanto a proyectos?
En cuanto a proyectos en marcha, en este momento, la Fundación IDIS cuenta con ocho grandes iniciativas en áreas que determinarán sin duda el futuro de nuestro sistema sanitario: interoperabilidad; receta privada electrónica sustentada en la anterior; cuidados intermedios sociosanitarios; calidad asistencial; resultados de salud; experiencia de paciente y del profesional sanitario; innovación, futuro y reforma del sistema.
5. ¿Será 2019 el año en que los médicos de sanidad privada sean también considerados autoridad ante la ley?
Según el Observatorio Nacional de Agresiones de la Organización Médico Colegial (OMC) del año 2017, hubo 515 casos de agresiones a médicos de nuestro país, lo que supone un aumento del 4% con respecto al año anterior.
La protección de los médicos desde el Estado es fundamental y quedó patente y plasmada en la modificación del Código Penal, mediante la publicación de la Ley Orgánica 1/2015 del 30 de marzo por la que se modifica la Ley Orgánica 10/1995, con fecha 23 de noviembre, del Código Penal, que reconoce como delito de atentado las agresiones que sufran los médicos en el ejercicio de su cargo. Dicha modificación a pesar de ser sustancial solo contemplaba como actos de atentado a aquellas agresiones que se cometan contra facultativos de la sanidad pública dentro de su carácter de funcionarios en aras al ejercicio de las funciones que les son inherentes, quedando por lo tanto al margen los médicos y por ende los profesionales que desempeñan la misma labor en la sanidad privada.
Ante esta situación se hace imprescindible una enmienda al Código Penal para que todos los médicos, en el ejercicio de sus funciones asistenciales, e independientemente del centro donde realicen su labor facultativa (público o privado), sean considerados autoridad pública por el ejercicio de sus funciones. No contemplar a los facultativos de la sanidad privada supone un claro perjuicio para los profesionales que trabajan en ella (262.525 profesionales de manera directa -un 65% trabaja en el ámbito extrahospitalario y un 35% el ámbito hospitalario-, 57.873 de ellos médicos), los cuales realizan las mismas funciones y presentan idéntica formación y capacitación, tanto legal como colegial, para el desarrollo de su trabajo, tal y como muestra el informe Análisis de la situación: Aportando Valor 2018.
Una de las prioridades de las autoridades sanitarias debe ser conseguir la máxima seguridad para todos los profesionales, sin importar el tipo de organismo, público o privado, en el que trabajen. Por ello desde la Fundación IDIS esperamos que las autoridades sanitarias sean sensibles a esta petición de tal forma que reconozcan la aportación de la sanidad privada y sus profesionales, cuya actividad es, hoy por hoy, fundamental para la sostenibilidad y solvencia del sistema sanitario tal y como lo conocemos.
6. Recientemente IDIS ha aprobado un código de conducta para su Responsabilidad Social (RSE). ¿Hasta qué punto son importantes este tipo de medidas?
La Responsabilidad Social es una de las palancas más importantes de la reputación de las organizaciones, instituciones y empresas, supone el hecho de poner de manifiesto y en valor de forma voluntaria el compromiso que cada cual contrae con todos sus grupos de interés o “stakeholders” y es la forma más transparente de manifestar a la sociedad el grado de implicación en los problemas que en estos momentos más afectan a la sostenibilidad del modelo social, económico y político del que nos hemos dotado.
El compromiso de la alta dirección, el ámbito de los recursos humanos, la protección y cuidado del medioambiente, las relaciones con la cadena de valor representada por clientes, proveedores, profesionales y ciudadanos, el compromiso con el entorno social, las relaciones con las administraciones públicas, el respeto por los competidores y la transparencia con los accionistas llegado el caso y desde luego la buena praxis en todo lo que es y supone el buen gobierno corporativo son elementos clave de toda política y estrategia de responsabilidad social que se precie y por ello hemos querido plasmarlo en un documento de compromiso (Código de Conducta de la Fundación IDIS) que acabamos de publicar y poner en conocimiento de toda la sociedad.
De todos es sabido que desde la Comisión Europea, desde el Consejo Estatal de Responsabilidad Social (CERSE) dependiente del Ministerio de Trabajo y desde las más altas instancias internacionales como la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo), la OIT (Organización Internacional del Trabajo), el FMI (Fondo Monetario Internacional), la IFC (Corporación Financiera Internacional), GRI (Global Reporting Initiative) o Naciones Unidas entre otras se está favoreciendo, impulsando y transmitiendo la idea de implantar sistemas de gestión de la Responsabilidad Social en las organizaciones, instituciones y empresas con proyectos y medidas concretas que supongan un acicate a la vez que refuercen los valores que deben impregnar a nuestro modelo de sociedad que de otra forma nos podría llevar a una pérdida de rumbo en la consecución de un legado de sostenibilidad y solvencia para las futuras generaciones.
7. ¿Habrá acciones similares el próximo año?
Tenga en cuenta que la responsabilidad social en las organizaciones no puede ser un elemento estratégico estático sino todo lo contrario, ha de suponer una fuerza viva de liderazgo transformador que le dé solidez y confianza a todas las operaciones y actuaciones que se llevan a cabo. En ese sentido en la Fundación IDIS implantamos internamente y hace unos años la política y estrategia de calidad mediante la norma ISO 9001 por la cual medimos todos nuestros procedimientos y procesos, los cuales son evaluados y auditados anualmente.
En ese mismo sentido y tal y como expresa la Comisión Europea y el CERSE procuramos trascender en esta misma materia hacia las organizaciones y empresas del sector y por ello generamos la acreditación QH (Quality Helathcare) por la que se evalúa y reconoce el esfuerzo realizado en la compleja senda de la calidad. En este momento ya son 126 centros asistenciales los que han recibido esta acreditación en alguna de sus diferentes modalidades.
Ahora avanzamos un paso más con la promulgación del Código de Conducta de la Fundación IDIS en base a su misión, visión y valores (responsabilidad, transparencia, honestidad, innovación, compromiso, confianza y tenacidad), un elemento básico de gestión de la política de responsabilidad social (RSE). Dicha iniciativa como ya he comentado surge de la necesidad de hacer patente el compromiso que la institución mantiene con todos los grupos de interés o “stakeholders” con los que se relaciona.
En el futuro vamos a continuar en este camino de mejora continua en el ámbito de la responsabilidad social una vez que supone un estímulo a la vez que un acicate para todos los miembros de la Fundación IDIS puesto que es un motor evidente de credibilidad, transparencia y confianza en la gestión. Hoy en día la responsabilidad social no es una opción, es una necesidad.
8. ¿Se valora lo suficiente a la sanidad privada en nuestro país?
Depende de a quién se le haga esta pregunta le dirá una cosa u otra. En mi opinión creo que la valoración ha de venir siempre de la mano de los hechos y en este sentido los datos son claros y evidentes, ya hay más de 11 millones de ciudadanos que tienen un aseguramiento privado de su salud, el crecimiento del sector es continuado y sostenido cada año y más de 262.000 profesionales trabajan en él dentro de sus 451 hospitales y más de 2.000 centros ambulatorios aproximadamente.
Otro dato que es muy relevante es que los momentos médicos alcanzan el 94% de satisfacción en cuanto a expectativas y experiencia de paciente y que el 84% de los empleados de la administración central (funcionarios) eligen año tras año la cobertura de su salud en la sanidad de titularidad privada.
Estas cifras lo mismo que los informes que publicamos todos los años hablan por sí mismos, no están sometidos a discusión o pareceres como de hecho pueden ser interpretadas las palabras, los datos objetivos transmiten una opinión muy positiva del sector por quien lo conoce y lo utiliza en mayor o menor medida.
Tenga en cuenta que el sector privado de la sanidad no mantiene un entorno cautivo, el ciudadano que acude a sus servicios y profesionales tiene la capacidad de elegir en base a su experiencia, fundamentalmente teniendo muy en cuenta la reputación acrisolada a lo largo del tiempo. Este hecho tan simple y a la vez tan determinante como es la libertad de elección es el que mide realmente la satisfacción de los ciudadanos y el que pone a cada uno en su lugar.
Nosotros desde luego vamos a continuar por la senda de la mejora continua en todos los sentidos, dotando a nuestros centros de los mejores profesionales y de los más avanzados sistemas de diagnóstico y tratamiento porque es como entendemos que la medicina cumple su papel fundamental que es poniendo a disposición del paciente y el ciudadano lo mejor en cada caso, la innovación y la cualificación al igual que la responsabilidad social no son una opción, representan una necesidad clave, muy especialmente en el ámbito de la salud.