La siniestralidad en carretera suele medirse en términos de víctimas mortales, que constituyen sin duda la peor consecuencia de los accidentes de tráfico. Sin embargo, un dato menos conocido es que por cada fallecido en carretera, se calcula que unas 70 personas sufren secuelas de por vida. Muchas de estas secuelas afectan al sistema neurológico en forma de daño cerebral, paraplejias, etc. De hecho, los accidentes de tráfico son la causa del 75 por ciento de los traumatismos cranoencefálicos y constituyen el daño cerebral adquirido más frecuente.
A nivel cerebral, “la lesión más común en los accidentes de tráfico es el daño axonal difuso, que puede conllevar diferentes problemas neurológicos”, explica Carolina Colomer, directora clínica de NeuroRHB, la unidad de neurorrehabilitación del Grupo Vithas. “Las lesiones más severas provocan que el paciente entre en coma, aunque también existen otros casos que presentan diversos tipos de alteraciones como problemas de movilidad, conducta, lenguaje, memoria y atención, independientemente de la edad que tengan”, añade.
Los pacientes dan un paso al frente
Conscientes por experiencia personal de las consecuencias del daño cerebral adquirido, varios de los pacientes que han sido tratados por Vithas NeuroRHB o que están todavía en su proceso de rehabilitación han decidido dar un paso al frente animados por los profesionales de esta unidad especializada y protagonizar la campaña en redes sociales #ConduceConCerebro. Pretenden así concienciar a los conductores especialmente durante el verano, una de las épocas del año en la que más accidentes se registran: solo entre julio y agosto, la DGT prevé más de 90 millones de desplazamientos en carretera.
Tal es el caso de Francisco, uno de los protagonistas de la campaña #ConduceConCerebro. Mecánico de profesión y gran aficionado al motorismo, sufrió un grave accidente que le provocó un traumatismo craneoencefálico severo, por el que estuvo en coma 41 días y en un periodo de amnesia postraumática alrededor de 3 meses.
Fueron muchas las secuelas que le quedaron a Francisco: desorientación, dificultades de atención, problemas de memoria, alteraciones conductuales, así como una lesión medular que le obliga a ir en silla de ruedas, según relata. El camino de su neurorrehabilitación fue “duro y largo” y tuvo que replantearse de nuevo sus planes, sus proyectos y su vida. A pesar de ello, poco a poco pudo cumplir sus nuevos objetivos, como terminar sus estudios, y, en la actualidad, vive independizado con su pareja.
Frases para grabarse en la cabeza
Según explica Pau Carrascosa, coordinadora del área de trabajo social de Vithas NeuroRHB, cada paciente ha seleccionado una frase con la que recordar un dato importante a la hora de conducir, o ha aportado un consejo con el que recordar la importancia de poner todos los sentidos en la carretera.
Y como una imagen vale más que mil palabras, han decidido que los profesionales de Vithas NeuroRHB acompañen sus frases con fotos de diferentes momentos de la rehabilitación que una persona con traumatismo craneoencefálico puede vivir tras sufrir un accidente o atropello. Algunos de los mensajes elegidos por los pacientes y que los diferentes perfiles de Vithas difundirán en redes sociales son:
• Cuando adelantes a un ciclista modera la velocidad y deja 1,5 m de distancia entre ambos.
• Si te notas cansado o con sueño, para a descansar.
• Al volante, un segundo de distracción puede cambiar tu vida.
• Las prisas y el volante es mejor no unirlas.
• La velocidad puede frenarte la vida.
• El móvil es tu enemigo en la carretera.
• En situaciones de atascos o retenciones debemos de aumentar la atención.
“Conducir es una de las actividades cotidianas más complejas que realiza el ser humano”, subraya la Dra. Belén Moliner, directora médica de Vithas NeuroRHB, ya que “realizar una conducción consciente implica la puesta en marcha de muchas capacidades físicas, motoras, cognitivas y emocionales”. Además de las capacidades motoras para manejar los mandos del automóvil, añade, “es necesario ver para percibir el entorno, memoria para recordar las normas de circulación y las señales y agilidad en la velocidad de procesamiento para reaccionar rápido ante un imprevisto”. Un complejo engranaje que solo funcionará correctamente si cada conductor #ConduceConCerebro.