El grupo de científicos y expertos en salud pública que reclamó una evaluación independiente de la gestión del Covid-19 en España ha remitido otra carta a The Lancet –que publicó la primera– para pedir un amplio apoyo de los partidos políticos, las asociaciones científicas y la sociedad civil a su causa.
“A pesar de que recibimos un amplio apoyo de más de 50 sociedades científicas y asociaciones que representan a las comunidades de profesionales de la salud pública, médicos y enfermeros”, comentan los autores, “existe ahora la necesidad de definir esta evaluación en términos de tiempo, alcance y liderazgo”.
En esta segunda misiva propone tres requisitos y cuatro principios guía para llevar a cabo con éxito la evaluación. Los tres primeros son la urgencia, el amplio apoyo político, científico y social, y el compromiso del Gobierno central y de los de las comunidades autónomas para escuchar las recomendaciones propuestas en dicha evaluación “y actuar de forma acorde” a la misma.
Los cuatro principios que deben guiar la evaluación son la independencia de los miembros del comité evaluador, la necesidad de centrarse en recomendaciones y no en repartir culpas, la paridad y multidisciplinariedad, y un alcance amplio, es decir, que no se quede solo en lo sanitario sino que aborde también la economía y los efectos sociales.
Académicos y expertos internacionales
De ellos, los autores –entre los que se encuentra Joan Carles March, de la Escuela Andaluza de Salud Pública, la investigadora del CSIC Margarita del Val o el exconsejero vasco de Salud, Rafael Bengoa– consideran que el más importante es el de la independencia. Que los miembros del comité evaluador “no trabajen para el Gobierno y no tengan intereses competitivos”, y recomienda académicos que trabajen tanto en España como en el extranjero, así como expertos internacionales “que puedan tomar parte en el comité de selección y el equipo de evaluación”.
Los firmantes animan a los gobiernos central y regionales a llevar adelante esta evaluación, “que puede llegar a ser un ejemplo para que otros países la repliquen”. Sugieren centrarse en iniciativas que se han llevado a cabo en Reino Unido o el estado australiano de Victoria y advierten de que “continuaremos ofreciendo propuestas más detalladas”.