Lorviqua (lorlatinib) ya está disponible en España para el tratamiento de pacientes adultos con cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) avanzado positivo para la quinasa del linfoma anaplásico (ALK) cuya enfermedad ha progresado tras recibir alectinib o ceritinib como primer tratamiento con un inhibidor de la tirosina quinasa (TKI) ALK; o crizotinib y al menos otro TKI ALK.
Este hecho confirma a lorlatinib, un inhibidor de ALK de tercera generación que ha sido desarrollado específicamente para abordar necesidades médicas no cubiertas, como son la progresión a nivel del SNC y la aparición de mutaciones de resistencia de ALK; como una de las opciones terapéuticas más avanzadas para el tratamiento de esta patología.
“Existe una necesidad médica para los pacientes con CPNM ALK positivo que recaen tras tratamiento con un ITK de segunda generación, debido a la aparición de mutaciones de resistencia a los medicamentos existentes para tratar esta enfermedad y a alta incidencia de aparición de metástasis cerebrales en el transcurso del tratamiento del CPNM ALK+”, declara el Dr. Mariano Provencio, jefe de servicio de Oncología en el Hospital Universitario Puerta de Hierro (Madrid) y presidente del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP). “En este sentido, lorlatinib abre un abanico de posibilidades sin precedentes en la práctica clínica al ser un inhibidor de ALK de tercera generación desarrollado específicamente para abordar estas necesidades”, concluye.
La disponibilidad en España sucede tras la aprobación por parte de la Comisión Europea, que estuvo respaldada por los resultados de un estudio clínico B7461001 de Fase 1 y 2 no aleatorio, con escalada de dosis y estimación de la actividad, de cohorte múltiple y multicéntrico, que mostró los resultados de la administración de Lorviqua (lorlatinib) en un total de 139 pacientes con CPNM ALK-positivo previamente tratados con al menos un inhibidor de ALK de segunda generación. En estos pacientes, la tasa de respuesta global fue de un 42,9 por ciento en aquellos tratados previamente con un inhibidor de ALK, y de un 39,6% en aquellos tratados previamente con dos o más inhibidores. Un 67 por ciento de los pacientes presentaban metástasis cerebrales. En estos pacientes, lorlatinib demostró respuestas antitumorales rápidas, profundas y duraderas como tratamiento de segunda línea y posteriores en pacientes que recibieron un ALK TKI previo de segunda generación.
Respecto al perfil de seguridad, lorlatinib es en general bien tolerado, con un perfil de seguridad manejable con reducciones de dosis y reacciones adversas en su mayoría G1-G2.
"La disponibilidad de lorlatinib supone un gran avance en el abordaje del cáncer de pulmón no microcítico con traslocación ALK", afirma Cecilia Guzmán, directora médica de la Unidad de Oncología de Pfizer España. "En Pfizer llevamos años dedicándonos a la investigación y al desarrollo de estas moléculas, y su disponibilidad en España significa que nuestro trabajo se trasladará al día a día de los pacientes, mejorando su pronóstico", añade.
La aprobación de lorlatinib marca un hito en el tratamiento del CPNM, que representa aproximadamente el 80-85 por ciento de los cánceres de pulmón , de los cuales los tumores ALK positivos suponen alrededor del 3-5 por ciento de los casos . El cáncer de pulmón es la primera causa de muerte relacionada con el cáncer en todo el mundo1 y en 2020 se estimaba que alcanzaría más de 29.500 nuevos diagnósticos en nuestro país, según los datos del informe de SEOM2.