El Hospital Beata María Ana de Madrid, con motivo del Día Mundial del Riñón que se celebra el próximo jueves, 9 de marzo, ha elaborado un decálogo que incluye consejos para cuidar la salud renal y señales de alerta para detectar precozmente cualquier dolencia relacionada con los riñones.
“La función principal de los riñones es la filtración y eliminación de desechos y del exceso de líquido del organismo. Se trata, por tanto, de un órgano fundamental para el correcto funcionamiento del cuerpo humano y su cuidado debería ser motivo de preocupación para toda la población”, asegura el doctor Gregorio Escribano, urólogo del Hospital Beata María Ana.
Las enfermedades renales como la litiasis o cálculos; tumores; infecciones; insuficiencia renal o hipertensión arterial, tienen una alta prevalencia en la población: “En muchos casos, las personas cursan estas patologías sin ser conscientes de ello hasta que el problema está bastante avanzado. Por este motivo, es importante seguir unas pautas adecuadas para prevenir la aparición de este tipo de dolencias y conocer algunos síntomas que pueden pasar desapercibidos pero que serán claves para diagnosticar precozmente la enfermedad”, subraya el doctor.
Hay señales de alerta que pueden pasar desapercibidas y a las que habría que prestar atención para diagnosticar precozmente una posible enfermedad renal.
1. Hematuria
La hematuria, o presencia de sangre en la orina, es una condición que precisa siempre de un estudio urológico para descartar una enfermedad renal.
2. Dolor en la región lumbar, sobretodo unilateral
La causa del dolor lumbar unilateral puede ser de origen renal o bien osteomuscular (frecuente en la población). El medico de atención primaria orientará sobre la necesidad de acudir o no al especialista para completar el estudio y descartar la afección renal.
3. Hipertensión arterial
En aquellos casos que la hipertensión no responde a la medicación habitual, será necesario consultar con el medico de atención primaria, que orientará sobre la necesidad de acudir o no al especialista para completar el estudio.
4. Retención de líquidos
La hinchazón sin motivo conocido en las piernas, tobillos, pies, cara o manos puede deberse a una retención de líquidos que tenga que ver con un problema renal. Por este motivo, es un síntoma al que conviene prestar atención para descartar este tipo de patologías.
5. Cambios en el volumen de diuresis
Los cambios en el volumen de diuresis (o volumen de orina eliminada) pueden obedecer a un problema renal o a un problema en su evacuación (prostatismo). De nuevo, será el medico de atención primaria quien orientará al paciente sobre la necesidad de acudir al especialista para estudiar la clínica en cada caso.
Asimismo, con el objetivo de prevenir la aparición de este tipo de patologías, el Dr. Escribano apunta una serie de recomendaciones que conviene tener en cuenta:
6. Mantener una dieta equilibrada y baja en sal
Alimentarse a través de una dieta equilibrada es la base para un buen estado de salud. En el caso concreto de los riñones, además, es especialmente importante no abusar de la sal en las comidas, teniendo en cuenta un máximo diario de 2mg. También se desaconseja una dieta con pocas grasas de origen animal. Asimismo, la prevención de problemas renales pasa por el consumo abundante de fruta y verdura.
7. Realizar ejercicio físico
Al igual que con otras muchas patologías, la realización de ejercicio físico moderado de manera regular está detrás de la prevención en las enfermedades del riñón. En este caso, la práctica de actividad física no solo reduce el riesgo de padecer enfermedad renal, sino que, en caso de que tenerla, retrasa su progresión.
8. Ingerir suficientes líquidos
Mantener un correcto nivel de hidratación en básico para tener una salud renal adecuada. En este sentido, la ingesta de líquido se debe individualizar en función de cada paciente. En general un sistema de medida adecuado podría considerarse alcanzando un volumen diario medio de orina de en torno al litro y medio.
9. Control de los niveles de glucosa en sangre y de la presión arterial
La diabetes y la hipertensión arterial son los principales factores de riesgo para padecer enfermedades de riñón. Por esta razón, llevar un estricto control de los niveles de glucosa en sangre y de la tensión arterial favorecerá el funcionamiento renal y nos permitirá acudir al médico de manera temprana si observamos alguna anomalía.
10. Evitar el tabaco
El tabaquismo está detrás de muchas de las enfermedades cardiovasculares de hoy en día y la enfermedad cardiovascular afecta al buen funcionamiento renal. Por este motivo es importante alejarse del humo de los cigarrillos.