El Hospital Beata María Ana ha reducido en un 50% la huella de carbono procedente de su sistema de iluminación tras haberlo sustituido por uno nuevo basado en tecnología LED.
El hospital ha llevado a cabo una reforma integral de su sistema de iluminación, que ha consistido en sustituir en todas sus dependencias las luminarias tradicionales por otras de tecnología LED.
Con el nuevo sistema de iluminación, las emisiones de CO2 se reducirán anualmente en cerca del 50%, pasando de 208 Toneladas (Tn) a 101 Tn.
“Desde el Hospital Beata María Ana hemos realizado una importante inversión económica en esta obra, que se enmarca en nuestras políticas de RSC, y nos reportará en el medio y largo plazo un importante beneficio medioambiental y económico”, declara Antonio López, responsable de Mantenimiento del centro hospitalario.
La utilización de tecnología LED ha supuesto en los últimos años una nueva forma de concebir la iluminación, y pese a que el coste inicial de las lámparas es superior al de las tradicionales, existe un importante ahorro económico a medio plazo gracias al menor consumo energético de este tipo de luminarias y a su larga vida útil, lo que se traduce en una reducción significativa de residuos y emisiones.