El sector sanitario y sociosanitario en España no solo cumple un papel esencial en el bienestar de la población, sino que también se erige como uno de los principales motores económicos y sociales del país. Dentro de este complejo panorama, la iniciativa privada juega un papel incuestionable, abarcando una amplia gama de áreas que van más allá del simple ámbito asistencial. Desde la economía hasta la investigación, pasando por la formación y la innovación, el emprendimiento privado en el sector ha demostrado su fuerza y su importancia a lo largo del tiempo.
Economía y empleo
Su aportación no solo se traduce en la prestación de servicios, sino también en una significativa generación de recursos que alimenta la economía nacional. En primer lugar, es crucial destacar el impacto económico que tiene el sector sanitario y sociosanitario privado en España. Representando una porción significativa del Producto Interior Bruto (PIB), el gasto sanitario alcanza cifras considerables, mostrando la magnitud de su influencia en la economía nacional. A través de los resultados económicos de empresas, la gestión de hospitales, los entornos residenciales y otros servicios relacionados, el sector privado contribuye de manera notable al crecimiento económico del país. Esta generación de recursos no solo sustenta la actividad empresarial, sino que también impulsa el crecimiento económico y la creación de riqueza en la sociedad.
Además de su contribución al Producto Interior Bruto (PIB) mediante la generación de recursos y riqueza, el emprendimiento privado en el sector sanitario y sociosanitario también tiene un impacto significativo en los ingresos fiscales del Estado. A través del impuesto de sociedades, las empresas de estos ámbitos y relacionadas contribuyen al sostenimiento de los servicios públicos y al desarrollo de infraestructuras. Además, muchas empresas del sector participan en el comercio internacional, contribuyendo de forma notable a las exportaciones del país y fortaleciendo su posición en el mercado global.
Una de las áreas donde el emprendimiento privado en la sanidad española destaca es en la generación de empleo cualificado. Con más de un millón de asalariados, abarca una amplia variedad de puestos de trabajo, desde profesionales de la salud altamente cualificados hasta personal administrativo, de servicios y de apoyo. Además, es alentador ver que un porcentaje significativo de estos empleos está ocupado por mujeres, lo que demuestra un avance hacia la equidad de género y la eliminación de techos y barreras.
Además, en un momento en que la España vaciada enfrenta desafíos demográficos y económicos, el sector sanitario y sociosanitario emerge como un motor de empleo, accesibilidad y cohesión en regiones rurales y menos pobladas. Las empresas de estos ámbitos ofrecen oportunidades laborales para profesionales altamente cualificados en diversos contextos entre los que se encuentra el social ayudando a frenar la despoblación y revitalizar comunidades locales.
Otro aspecto relevante es el papel crucial que desempeñan las mujeres en el sector sanitario y sociosanitario privado. Desde profesionales en el ámbito de la salud y la medicina hasta empresarias y líderes en la industria, las mujeres están contribuyendo de manera significativa al avance y desarrollo del sector. Su presencia no solo promueve la equidad de género, sino que también enriquece la diversidad y la perspectiva en el ámbito sanitario.
Investigación, innovación y formación
El emprendimiento privado en la sanidad española es un motor de innovación y desarrollo (I+D). Invirtiendo en tecnología sanitaria de vanguardia, financiando una gran parte de los ensayos clínicos, desarrollando nuevas formas de diagnóstico, tratamientos y terapias y siendo responsable de una proporción considerable de las patentes presentadas, las empresas privadas están en la vanguardia de la investigación y el desarrollo en el campo de la salud. Esto no solo impulsa el avance científico, sino que también mejora la calidad y la eficiencia de los servicios sanitarios disponibles para la población. Esta cultura de innovación no solo mejora la calidad de la asistencia médica, sino que también posiciona a España como líder en investigación y desarrollo en el campo de la salud a nivel internacional.
Otro aspecto importante es la formación de profesionales de la salud. Con un elevado número de universidades privadas que ofrecen programas de estudio en el ámbito sanitario y de la salud, el sector privado desempeña un papel fundamental en la preparación de la próxima generación de médicos, farmacéuticos, enfermeras, psicólogos, asistentes sociales y otros especialistas. Esto garantiza un flujo constante de talento y expertos altamente capacitados que son esenciales para mantener la calidad y la seguridad en la asistencia médica y social.
Asistencia sanitaria y atención sociosanitaria
Una cuarta parte de la población española recibe asistencia sanitaria a través del sector privado; más del 40% de los recursos sanitarios de nuestro país y más del 70% de los recursos sociosanitarios son de titularidad privada, lo que subraya su importancia en el engranaje de la salud y el tejido social de nuestro país a través de sus estructuras, sus equipos y dotación, su ingente actividad y su eficiencia.
Responsabilidad social, calidad y resultados
Las empresas y organizaciones sanitarias también demuestran un fuerte compromiso con la responsabilidad social, facilitando y favoreciendo el acceso a la asistencia médica y promoviendo prácticas empresariales éticas y sostenibles acordes y alineadas con los estándares internacionales más avanzados en esta materia. Las empresas y organizaciones de carácter privado en el sector de la salud están trabajando para hacer una diferencia positiva aportando valor a la sociedad.
El emprendimiento privado en la sanidad española se distingue por su compromiso con la calidad y los resultados. Las empresas del sector se esfuerzan por ofrecer servicios de salud y sociales de primera calidad, centrados en el paciente, en la persona, y basados en evidencia científica. Esta dedicación a la excelencia ha contribuido a la reputación y el reconocimiento internacional del sector como un referente en el mundo.
En conclusión, el emprendimiento privado en el sector sanitario español despliega una fuerza y una importancia que trascienden los límites de la asistencia médica. Desde su contribución económica y social hasta su papel en la innovación y la formación, el sector privado de la sanidad está impulsando el progreso y el bienestar en España y más allá. Por lo tanto, el sector privado en España no solo es un pilar fundamental del sistema de salud y social, sino también un actor clave en la economía y la sociedad en su conjunto. Su papel como motor económico, de innovación, de empleo, de formación y de responsabilidad social, entre otros, es indispensable para garantizar el avance de nuestro país hacia un futuro prometedor desde un presente consolidado.
Dr. Fernando Mugarza (PhD, MD, MBA)