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Redacción. Madrid El pasado día 27 de octubre de 2017, el Hospital Vithas San José tuvo una de las visitas más esperadas y especiales de los últimos tiempos; por fin la joven boliviana Yoisy iba a hacerle frente a su complicada operación, esa que cambiaría su vida por completo. El Hospital Vithas San José pertenece al grupo sanitario Vithas que cuenta en España con 19 hospitales y 26 centros especializados Vithas Salud.
“La intervención fue todo un éxito gracias a la colaboración incondicional y sin precedentes de todo el personal implicado y de todos lo que, desde sus casas, han participado directa o indirectamente con la organización y ejecución de la cirugía”, explica Vega, traumatólogo en el hospital vitoriano y uno de los fundadores de Adato Elkartea, la asociación que ha hecho que este proyecto haya sido posible. Tanto el hospital alavés como todo el personal que ha participado en este proyecto lo han hecho de manera voluntaria, solidaria, y, sobre todo, humana, que le han dado una mejor calidad de vida a una joven que nunca hubiese podido hacer frente a esta operación en su país. Para realizar esta intervención, grandes profesionales en este ámbito a nivel nacional se acercaron al hospital vitoriano a poner su granito de arena. Por eso, a parte de la participación del personal del propio hospital, acudieron cirujanos especialistas en Cirugía Torácica del Hospital de Cruces, especialistas en Columna Vertebral desde el Hospital Niño Jesús en Madrid, especialistas en Neurofisiología de Barcelona, especialistas en Instrumentación vertebral de Gijón y del Banco de Huesos de León. 7 horas de cirugía en equipo para conseguir despegar y liberar sus costillas fusionadas y posteriormente reducir y fijar su escoliosis. Después de la intervención es tiempo de fisioterapia respiratoria y osteo muscular e integración social a través de la familia de acogida. El tiempo previsto de estancia es de 6 meses desde la fecha de la cirugía, para garantizar el retorno a Bolivia en las mejores condiciones posibles minimizando así la probabilidad de complicaciones. Historia de Yoisy Yoisy es una joven boliviana de 20 años que con tan solo 3 años a la edad sufrió una patada en el tórax propiciada por su padre cuando éste estaba agrediendo a su madre. El resultado fue varias costillas rotas, contusión pulmonar, infección, adherencias de la piel a las costillas y fusión de 4 costillas izquierdas. Además, con los años ha desarrollado una escoliosis progresiva producida por un crecimiento asimétrico del tórax que no le deja hacer una vida normal: dolores, disfunción respiratoria y estética. Vega y sus acompañantes conocieron a Yoisy hace 6 años. Entonces era tan solo una niña de 14 años, que aprovechaba cada vez que viajaban los profesionales a su país para pedirles que, por favor, trataran su patología, pero una intervención tan complicada como la suya era muy difícil de llevar a cabo en Bolivia. “Año tras año nos esperaba junto a su hermana, cada vez más “torcida”, y llena de optimismo. Ella no salía de casa por su evidente deformación física. Al cumplir su mayoría de edad, nos ponemos manos a la obra, para poder ofrecerle todo lo que estuviese en nuestra mano. Tras 8 meses con temas burocráticos, hemos podido traerla a Vitoria”, cuenta Vega. Contexto Imanol Vega, Adela Fonseca, y Paco Granados, llevan trabajando más de 7 años en el campo de la cooperación con distintas ONGs: Denok Osasunaren Alde (DOA) en Trinidad-Bolivia y Les Enfants du Noma en Benín-África. Es en estos dos países donde desarrollan sus misiones como cooperantes durante varias semanas al años; y es allí precisamente donde comienza a forjarse el proyecto asociativo ADATO Elkartea, un proyecto que pretende poder atender en Vitoria-Gasteiz a niños y adultos cuyos casos no puedan ser solucionados en su lugar de origen durante su visita a esos países, principalmente por falta de recursos, o bien personas sin recursos del territorio nacional que precisen de ayuda traumatológica u ortopédica. La gran mayoría de los casos pueden ser solucionados durante las misiones anteriormente comentadas “in situ”, pero en otros tantos, la falta de recursos, la complejidad de la cirugía o la falta de medios materiales, no han permitido llevar a cabo lo que a estos profesionales les gustaría. Hace 4 años, de la mano de la organización no gubernamental, Denok Osasunaren Alde (DOA), un grupo de voluntarios, hoy Adato Elkartea, trajeron de Bolivia a Miguel Ángel, un chico con una tibia rota e infectada. Tenía una pierna más pequeña que la otra, unos 7 centímetros, y tras una operación en la que tomaron parte de manera totalmente altruista diferentes especialistas en éste ámbito, consiguieron alargarle la misma hasta igualarla con la otra. “Un año más tarde, Miguel Ángel volvía a su casa con las dos piernas iguales y dispuestas a iniciar la carrera de medicina”, explican los responsables de la asociación Adato. En esta ocasión, la protagonista ha sido Yoisy, que permanecerá 6 meses en Vitoria gracias a una familia de acogida que, sin dudarlo, han querido participar en este proyecto. La joven llegó de Bolivia con Vega, Adela y Paco, miembros Adato Elkartea que venían de estás tres semanas en Trinidad de la mano de Denok Osasunaren Alde, DOA. Estos tres profesionales son los que han pagado su billete de avión, y los que han costeado parte de su estancia en nuestra ciudad y quienes han asumido parte de los tratamientos e intervención que se le han realizado a Yoisy de manera altruista gracias a la colaboración del Hospital Vithas San José con este proyecto solidario y humano. Por su parte, el Hospital Vithas San José se encuentra inmerso en diferentes proyectos solidarios y humanos, como es la Fundación Tierra de hombres. Un proyecto conjunto en el que tanto el Hospital, como sus profesionales, han colaborado para poder ofrecer una mejor calidad de vida a los niños de países subdesarrollados que han traído para tratar sus patologías. Es por ello que, cuando Vega propuso a la dirección del Hospital colaborar con este proyecto, y más concretamente, del caso de Yoisy, no dudaron en colaborar y ofrecer todo lo que estuviese en su mano para ayudar a mejorar la calidad de vida de la protagonista de esta historia que tanto les conmovió. |
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