Según el Instituto Nacional de Epidemiología, entre los años 2003 y 2012 la tasa de mortalidad por cáncer en España se redujo cada año un 1,32% y un 0,56% en hombres y mujeres respectivamente . Esta tendencia a la baja, mantenida desde hace años, refleja cómo ha mejorado la supervivencia de los pacientes con distintos tipos de tumores gracias a las actividades preventivas, las campañas de diagnóstico precoz y a los distintos avances terapéuticos1. Así se ha puesto de manifiesto en el X Seminario de Periodistas ‘Curar y cuidar en Oncología’, organizado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la biofarmacéutica MSD y celebrado en Alcalá de Henares (Madrid).
Félix del Valle, director de la Unidad de Oncología de MSD España y Portugal; Encarnación Glez. Flores, oncóloga médico del Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada; Mariví Tornamira, directora médica del área de Oncología de MSD en España; Ruth Vera, presidenta de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM); Cristina Ibarrola, jefa del servicio de Efectividad y Seguridad Asistencial del Servicio Navarro de Salud; Marga Majem, oncóloga médico del Hospital de la Santa Pau i Sant Pau (Barcelona); Gerardo Cajaraville, jefe del servicio de Farmacia Hospitalaria del Instituto Oncológico de Guipúzcoa (San Sebastián); y Emilio de Benito, presidente de la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS). |
Este tradicional seminario, que cumple en 2018 su décima edición, ha estado dedicado precisamente a ‘La supervivencia en cáncer como indicador de excelencia en Oncología’. Como ha destacado la presidenta de SEOM, Ruth Vera, jefe de Servicio de Oncología Médica del Complejo Hospitalario de Navarra, “para continuar mejorando los resultados en Oncología necesitamos una estrategia coordinada a nivel nacional para la investigación de las alteraciones genómicas, su incorporación a la práctica clínica, la integración de los datos clínicos y la evaluación de los resultados de los tratamientos y el análisis conjunto de todos estos datos”.
Desde SEOM –continúa Vera–, “estamos trabajando para contribuir a alcanzar estos retos. Hemos puesto en marcha, en colaboración con MSD, un nuevo proyecto denominado ONCOEVALUA. El objetivo de esta iniciativa es estandarizar indicadores de medida de resultados en salud en Oncología, integrando datos de práctica clínica de pacientes de cáncer colorrectal, mama y pulmón, en enfermedad avanzada, para desarrollar un cuadro de mandos de aplicación en estrategias de gestión sanitaria. Nuestro objetivo es mejorar los resultados en salud y la eficiencia en el abordaje clínico del paciente oncológico, asegurando la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud, porque esto nos puede ayudar a conocer el verdadero valor que aportan los fármacos en vida real tras su incorporación”. La presidenta de SEOM ha detallado que ya se trabaja en unos indicadores consensuados, de cara a realizar un proyecto piloto en 2019 que pueda ser utilizado en los diferentes Servicios de Oncología a partir de 2020.
Por su parte, Félix del Valle, director de la Unidad de Oncología de MSD España y Portugal, ha destacado que la supervivencia de los pacientes con cáncer en nuestro país se sitúa en torno a un 53% a los 5 años1. “España está a la vanguardia en el tratamiento del cáncer, porque contamos con profesionales del más alto nivel en el campo de la Oncología Médica, que proporcionan a los pacientes los últimos avances terapéuticos, fruto de largos años de investigación al servicio de los pacientes, de su bienestar y de su calidad de vida logrando una mayor supervivencia”.
Importancia de los indicadores
En ese sentido, Cristina Ibarrola, jefa de servicio de Efectividad y Seguridad Asistencial del Servicio Navarro de Salud, se ha centrado en la importancia que tiene el aprovechamiento de la información que ofrece la explotación de resultados de vida real a través de las nuevas tecnologías para mejorar la atención sanitaria y ha coincidido en la necesidad de evaluar resultados, especialmente en un ámbito tan sensible como la Oncología, “en donde estamos asistiendo a un alto grado de innovación de nuevos tratamientos de alto impacto presupuestario”.
Según ha detallado la especialista, la medicina personalizada y la innovación terapéutica podrían suponer “mejoras en la calidad asistencial de pacientes con cáncer, con mayor efectividad, seguridady eficiencia”, pero exigen la definición estructurada de indicadores de resultados en salud. “Disponer de unos indicadores consensuados a nivel de todas las comunidades autónomas permitirá la comparabilidad de resultados y la identificación de buenas prácticas, que mejoren la calidad de la atención en procesos oncológicos”, ha destacado, abundando en los objetivos que persigue el proyecto ONCOEVALÚA.
Por su parte, Gerardo Cajaraville, jefe del Servicio de Farmacia Hospitalaria del centro Onkologikoa de San Sebastián, también ha remarcado la importancia de los resultados en salud y ha afirmado que: “poner en marcha sistemas de medida de resultados en oncología es una herramienta esencial para poder mejorarlos. Nuestro esfuerzo se debe centrar en definir la mejor manera de afrontar este nuevo reto, en identificar los indicadores de medida necesarios y en adaptar nuestros sistemas de información y nuestros circuitos asistenciales a esta nueva necesidad. Los nuevos fármacos oncológicos podrían aportar beneficios a los pacientes. Las autoridades sanitarias los ponen a disposición de la población porque los ensayos clínicos han mostrado una relación beneficio/riesgo favorable.
Sin embargo, es necesario confirmar este efecto positivo en los pacientes que los reciben en condiciones reales. Para ello no es suficiente poner el foco en medir la supervivencia, la variable más importante sin duda alguna. También es indispensable conocer cómo afecta a nuestros pacientes la evolución de la propia enfermedad y el tratamiento aplicado. Cuál es el impacto del mismo en la calidad de vida en todas sus dimensiones (física, psicoemocional, social, laboral, etc), en el control de los síntomas y de los efectos secundarios, y en general, sobre la experiencia vivida por el paciente. Para ello es indispensable integrar la percepción del propio paciente y esto solo es posible fomentando la participación del mismo y situándolo en el centro del proceso asistencial. El proyecto ONCOEVALUA y otras muchas iniciativas que están viendo la luz en nuestro país pueden contribuir de forma decisiva a este fin. A los profesionales sanitarios nos corresponde impulsar todos estos nuevos conceptos y trabajar coordinadamente para avanzar en este apasionante campo”.
Una vez que el paciente recibe un diagnóstico oncológico, el siguiente paso es determinar el mejor tratamiento. “En este sentido la investigación clínica en Oncología es el elemento inicial en la búsqueda de los mejores resultados. Gracias a la investigación, cada día conseguimos reducir la mortalidad del cáncer y estamos más cerca de conseguir que se convierta en una enfermedad crónica e incluso curable”, explica Mariví Tornamira, directora médica del Área de Oncología de MSD.
Medicina de precisión en Oncología
Encarnación González Flores, oncóloga médico del Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada y secretaria general de la Junta Directiva de SEOM, por su parte, al hablar de los avances en Oncología que ofrece, por ejemplo, la llamada medicina de precisión, ha comentado que “aún falta mucho camino por andar, pero hay que abrir las puertas al futuro y comunicar que nos encontramos en la era del tratamiento personalizado. Actualmente ya hay muchos tumores de los que disponemos de biomarcadores que nos permiten seleccionar un tratamiento específico, si bien esto aún no está disponible en todos los tumores”, ha explicado la especialista.
González Flores ha centrado su intervención en este tipo de tratamientos y en cómo garantizan mejores decisiones para optimizar el resultado en cada paciente. “En la medicina de precisión a la que nos dirigimos en el tratamiento del cáncer, la selección individualizada del tratamiento se basa -además de en las características clínicas del paciente- en los biomarcadores determinados en el tumor, que nos pueden servir de factor predictivo de respuesta en cada paciente”, ha detallado la especialista, quien ha destacado, además, que “en SEOM estamos preparados y nos hemos puesto a disposición del Ministerio de Sanidad para trabajar en la adecuada planificación e implementación de la estrategia de Medicina Personalizada en España”.
Biomarcadores y cáncer de pulmón
En este mismo aspecto ha abundado Margarita Majem, oncóloga médico del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona y vocal de la Junta Directiva de SEOM, que ha centrado su intervención en cómo la determinación de biomarcadores como el PD-L1 en ocasiones ha supuesto un avance que ha implicado un incremento en la supervivencia de los pacientes en cáncer de pulmón. “El manejo de los pacientes de cáncer de pulmón ha mejorado en los últimos años. La aparición de los marcadores tumorales ha permitido tratamientos dirigidos . Estos tratamientos, junto con la inmunoterapia2 3, han permitido la aparición de supervivencias mayores en cáncer de pulmón”, ha señalado.
Majem ha destacado el papel que ha tenido conocer el funcionamiento de la proteína PD-L1 como biomarcador. “La importancia de PD-L1 es que nos puede permitir en ocasiones, en los pacientes de cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) y en función del nivel de expresión de esta proteína, conocer las probabilidades de respuesta al tratamiento ”, destaca la especialista.
La jornada ha estado moderada por el periodista Emilio de Benito, presidente de la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS), quien ha destacado que “por prevalencia y cantidad de novedades”, la Oncología es un área en primera línea informativa. “La especificidad y sofisticación de los nuevos abordajes hacen que los periodistas, comunicadores, profesionales y pacientes tengan que estar en un continuo proceso de actualización de conocimientos”, ha subrayado De Benito, quien ha destacado la importancia que tienen en este sentido jornadas como la que organizan SEOM y MSD. “Como periodista de El País y como presidente de ANIS creo que esta jornada es una oportunidad para un aprendizaje crítico, que es algo que todos necesitamos”, ha apostillado el comunicador.