Los grills dentales son dispositivos decorativos removibles que se colocan sobre los dientes anteriores. Están hechos de materiales como oro, plata o metales incrustados con gemas, y en los últimos años se han popularizado a través de artistas y celebridades. Sin embargo, es preciso conocer que estos accesorios pueden afectar la salud oral y causar daños a los dientes y las encías, interfiriendo con el funcionamiento normal de la boca.
Existen dos modalidades de grills: los removibles, que se quitan y ponen fácilmente sobre los dientes y que son populares debido a su facilidad de uso y la capacidad de cambiar el estilo según la ocasión; y los permanentes, que se adhieren de manera más fija a los dientes, pero suelen requerir un procedimiento dental para colocarlos y retirarlos.
En este sentido, según el último estudio de Salud Bucodental de Sanitas, el 44% de los españoles asegura estar más preocupado por su estética dental que hace 5 años. “Existe un creciente interés por tendencias que afectan a la estética dental. En el caso de los grills, independientemente de la modalidad elegida, es fundamental mantener una higiene oral oportuna y cuidar la salud de los dientes y las encías. Estos dispositivos pueden tener un impacto negativo en la salud bucal si no se usan y se cuidan adecuadamente, por lo que es esencial seguir las recomendaciones de un profesional dental y utilizarlos con responsabilidad”, explica la Dra. Lorena Trinidad Bueno, odontóloga del departamento de Innovación y Calidad Clínica.
Ante esta situación, la Dra. Trinidad Bueno advierte de los problemas que ocasiona el uso incorrecto de estos accesorios:
Acumulación de placa y sarro. Los grills suelen dificultar la limpieza apropiada de los dientes, así como su alrededor. Esto trae consigo la acumulación de placa y sarro, que son depósitos bacterianos que causan caries y enfermedades de las encías si no se eliminan con una higiene dental conveniente.
Dificultad en la detección de problemas dentales. Su uso prolongado puede ocultar signos tempranos de problemas dentales como caries o daños en los dientes, lo cual retrasa la detección y un tratamiento adecuado.
Irritación y daño en las encías. Estos accesorios frotan contra las encías y producen irritación. Con el tiempo, esto puede originar una inflamación crónica de las encías, conocida como gingivitis. Si no se controla, la gingivitis puede avanzar a periodontitis, una enfermedad de las encías más grave que provoca daño al tejido de soporte de los dientes y pérdida dental.
Inconvenientes en la función oral. Los grills, en ocasiones, interfieren con la capacidad de masticar idóneamente los alimentos y dificultar así la pronunciación de ciertos sonidos. Esto afecta la función oral y la comodidad al comer y hablar.
Posibles lesiones dentales. Si estos complementos no están ajustados adecuadamente o si se usan de manera descuidada, pueden acarrear lesiones dentales, como astillamientos o fracturas en los dientes.
Reacciones alérgicas. Algunas personas experimentan reacciones alérgicas a los materiales utilizados en los grills, lo que propicia irritación y molestias en la boca.
La Dra. Trinidad recomienda una serie de pautas para colocar estos accesorios de manera segura:
1. Acudir al dentista: Es recomendable que un odontólogo realice la colocación o supervise el proceso para garantizar un ajuste adecuado y evitar daños a los dientes y las encías.
2. Asegurar la limpieza: Antes de colocar los grills, es importante limpiar bien los dientes para prevenir infecciones o irritaciones en la boca.
3. Mantener la higiene oral: Es fundamental mantener una buena higiene oral incluso con los grills puestos, cepillando los dientes y usando hilo dental regularmente para prevenir problemas dentales.
“En definitiva, a pesar de que los grills son atractivos desde un punto de vista estilístico para ciertas personas, siempre se ha de priorizar la salud bucal y consultar a un profesional, ya sea de manera presencial o a través de videoconsulta, antes de considerar su uso a fin de garantizar que se tomen decisiones informadas y se minimicen los riesgos asociados con estos accesorios”, concluye la odontóloga.