El jefe del Servicio de Reumatología de los Hospitales Universitarios Hospiten en Tenerife, el doctor Jerónimo Balsalobre, informa de que el grupo hospitalario continúa su labor investigadora para obtener nuevas terapias contra el lupus, una enfermedad autoinmune que afecta en su mayoría a mujeres y que tiene un componente hereditario.
Se trata de una afección poco frecuente de la que aún se desconoce la causa. Si embargo, el diagnóstico precoz actual mejora el pronóstico. No existe actualmente una cura para esta enfermedad, pero se pueden evitar los brotes, tratar los síntomas y reducir el daño orgánico y cambios en el estilo de vida, sobre todo, en cuanto a fotoprotección se refiere.
El especialista de Hospiten explica que “la enfermedad consiste en una hiperactivación anómala y persistente del sistema inmune, de manera que puede dañar cualquier órgano, la sangre, la piel o el sistema nervioso central “.
Los síntomas más comunes son la fiebre, el dolor e hinchazón articular, las erupciones cutáneas, generalmente en la cara y en forma de mariposa, y los dedos pálidos o de color púrpura por el fenómeno de Raynaud.
“Existe un claro predominio de la enfermedad entre las mujeres jóvenes en edad de procrear”, expone el doctor Balsalobre. Asimismo, insiste en que los síntomas pueden aparecer y desaparecer en cualquier momento, en forma de brotes con intermitencia que variará entre los afectados.
A pesar de que estos datos son conocidos, afirma que aún no existe una prueba específica para el lupus, ya que a menudo se confunde con otras afecciones. “Pueden pasar meses o años hasta que se diagnostica”, sostiene. Por ello, el experto incide en la relevancia de las investigaciones sobre la enfermedad para lograr avances terapéuticos que, hoy en día, han disminuido considerablemente la morbimortalidad.
El médico especialista recuerda así que el próximo 10 de mayo se celebra el Día Mundial del Lupus, una fecha para crear conciencia sobre la existencia de esta enfermedad crónica.
Desde el área de Reumatología de Hospiten, los expertos recomiendan evitar la exposición solar. Asimismo, se aconseja no fumar y que las mujeres no se queden embarazadas mientras la enfermedad esté activa, comportando este hecho un riesgo tanto para el feto como para la madre.