Los jugadores de eSports dedican horas a esta disciplina, y son numerosos los casos de jóvenes profesionales que se han retirado de la competición debido a lesiones en espalda, manos y codos. Prevenirlas es posible conociendo las patologías asociadas y teniendo en cuenta una serie de hábitos, algo que confirma el doctor Antonio Hernández Lecuona, jefe del Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica del Hospital Universitario Hospiten Rambla.
“Las lesiones más frecuentes son las que afectan a la espalda, debido al tiempo que estos jugadores pasan sentados frente al ordenador, mientras que sostener los mandos de las consolas por largos periodos de tiempo puede provocar lesiones más graves”, asegura.
El jugador profesional de eSports del Club Deportivo Tenerife, Andrés Rodríguez ‘Andyelmessy’, es consciente de ello y por eso acude cada año a revisión al Hospital Universitario Hospiten Rambla “para estar al máximo nivel de cara a las competiciones”, explica el jugador.
Cuidar pulgares, muñecas y codos
Los pulgares sufren tendinitis De Quervain (inflamación del recubrimiento de los tendones abductor largo y extensor corto del dedo) y tendinitis de dedo en resorte, que afecta a los tendones que lo flexionan.
El conocido síndrome del túnel carpiano es otra de las afecciones con las que se encuentran los jugadores de eSports, debido a la posición fija que mantienen sus manos durante las partidas y sobre todo, en aquellas que necesitan teclado para desarrollarse.
A nivel del codo, la lesión más grave es la epicondilitis lateral, más conocida como codo de tenista, que produce una inflamación de los tendones que unen los músculos del antebrazo con la parte exterior del codo.
La importancia del descanso
“Los periodos de descanso son muy importantes” asegura el doctor Hernández Lecuona, ya que es un deporte que conlleva estrés en las manos y requiere mantener una postura estática por mucho tiempo. Por ello, recomienda que, en los juegos con partidas largas (más de 20 minutos), “se hagan pausas de mínimo cinco minutos entre partida y partida”, explica. Para las jugadas cortas, con establecer pausas de 10 minutos cada 40 minutos es suficiente.
Para evitar lesiones de columna, el especialista aconseja adoptar una postura correcta, sin inclinarse hacia delante y manteniendo la zona lumbar apoyada en el respaldo de la silla, que debe ser personalizada teniendo en cuenta las características físicas de cada jugador.
Un buen equipamiento, fundamental para prevenir lesiones
En cuanto al equipamiento utilizado durante las partidas, lo recomendable es que el monitor del ordenador se encuentre a la altura de los ojos del jugador y a una distancia de aproximadamente un brazo extendido. El teclado, debe tener una inclinación de 15 grados hacia arriba, para poder situar las muñecas en posición neutral y que los codos tengan una flexión aproximada de 30 grados. El ratón, ha de estar situado a una distancia suficiente del teclado que permita manejarlo cómodamente.
“A la hora de sostener el mando de la consola, los jugadores suelen apoyar los antebrazos en los muslos e inclinar la espalda hacia delante, lo que puede provocar a la larga lesiones en la columna”, afirma el doctor Hernández Lecuona, por lo que aconseja apoyarlos en una mesa para evitarlo.
Calentamiento y estiramientos
El especialista apunta que “es imprescindible contar con una correcta rutina de calentamiento para desarrollar esta práctica sin lesiones, calentando la musculatura y las articulaciones con diferentes ejercicios”. Al terminar de jugar, considera que “lo más adecuado es desarrollar una tabla de estiramientos, que cuente con ejercicios que estiren tanto dedo por dedo, como la muñeca y el codo”.