La Clínica IMQ Zorrotzaurre, el mayor centro sanitario privado de Euskadi, ha conseguido recientemente la cuarta reacreditación de la Joint Commission International, la máxima y más exigente certificación mundial de calidad y seguridad asistencial a la que puede optar un hospital. Ve con ello reconocida su excelencia en los numerosos estándares que esta acreditación comprende, habiendo sido, además, en su momento la primera en obtenerla en el País Vasco.

A día de hoy, en esta comunidad autónoma, tan sólo el guipuzcoano Hospital Alto Deba comparte este reconocimiento, lo que sitúa al hospital de IMQ a la cabeza de Europa en medidas de seguridad en beneficio de las y los pacientes.

La Joint Commission es la organización con más experiencia en acreditaciones sanitarias del mundo y una de las más reputadas en este ámbito. En España tan solo diecinueve hospitales cuentan con esta distinción y, a nivel internacional, forman parte de este conjunto restringido de organizaciones que han logrado cumplir sus requerimientos, centros tan prestigiosos como la Clínica Mayo, el hospital Mount Sinaí o el MD Anderson de Houston.

El proceso de renovación de la acreditación, que se efectúa cada tres años, se ha desarrollado en la Clínica IMQ Zorrotzaurre durante ocho días, en los que tres evaluadores externos han revisado y confirmado el cumplimiento de cerca de 1.400 estándares.

Durante este tiempo se ha revisado numerosa documentación y se han inspeccionado todos los procesos, las instalaciones y servicios asistenciales del hospital, entre ellos, el bloque quirúrgico, bloque obstétrico, unidad neonatal, farmacia, área de hemodinámica, hospital de día, unidad de reanimación, cuidados intensivos, área de hospitalización, sistemas de prevención, control y mantenimiento, cocina, radioterapia y medicina nuclear, cadena de suministros y compras, y un largo etcétera.
La reacreditación ha requerido, además, la participación de varios pacientes hospitalizados para analizar de forma exhaustiva su historia clínica y el cumplimiento de los distintos protocolos asistenciales.

En todo este proceso, la colaboración y compromiso por parte de todos los profesionales, tanto asistenciales como no asistenciales, fue el elemento más importante e indispensable para conseguir el resultado excelente obtenido.

La citada acreditación sitúa al paciente en el centro del proceso y evalúa todos los aspectos de la gestión, la calidad, la atención y la seguridad desde su llegada hasta el momento del alta. Tal y como afirmó el doctor Nicolás Guerra, director de las Clínicas IMQ, “además de la gestión de los servicios y la asistencia, se miden aspectos como la correcta identificación de las y los pacientes; la efectividad de la comunicación de los profesionales; la seguridad de la medicación de alto riesgo; la reducción del riesgo de infecciones asociadas a la atención sanitaria, o la disminución del riesgo de lesiones en pacientes producidas por caídas, todos ellos objetivos internacionales en seguridad del paciente, que en las clínicas IMQ son primordiales”.

Por su parte, Isabel Urrutia, directora de Calidad y Seguridad del Paciente de las clínicas IMQ, recalcó que el estándar de calidad de la Joint Commission International, “en cuanto a los objetivos centrados en el paciente, evalúa aspectos como el acceso y continuidad de la atención, derechos de evaluación y atención, anestesia y atención quirúrgica, manejo y uso de medicamentos y educación. Punto último este que incluye tanto a los pacientes como a sus familiares y al que desde IMQ damos una especial importancia debido al alto índice de prevención que de él se deriva”.

El equipo de la Clínica IMQ Zorrotzaurre comenzó a trabajar con el objetivo de alcanzar los estándares de seguridad de la Joint Commission International (JCI) en 2010, cuando aún se ubicaba en la antigua Clínica Vicente San Sebastián. Se acreditó con la JCI en el año 2023 y ha estado sometida durante una década a evaluaciones trienales (2017-2020-2023), siendo la de este año, la cuarta reacreditación a la que se somete.

Otras acreditaciones

La clínica acaba de pasar también la renovación de las certificaciones de Aenor según las normas de calidad (ISO 9001:2015), seguridad del paciente (UNE 179003:2013), medioambiente (ISO 14001:2015), prevención de riesgos laborales (ISO 45001:2018) e I+D+i (UNE-166.002:2021).