Hospiten apuesta por una práctica del deporte saludable donde la nutrición es un elemento fundamental al mejorar el rendimiento deportivo y evitar las lesiones.
La alimentación es uno de los pilares de lo que se llama el entrenamiento invisible, y que junto al descanso y la hidratación constituyen una de las partes más olvidadas entre una sesión de entrenamiento y otra, pero básico para un rendimiento correcto.
Según el especialista en Endocrinología y Nutrición de Hospiten, el Dr. Ignacio Llorente, los deportistas son conscientes de la alimentación desde hace relativamente poco tiempo a pesar de que lo integren en su entrenamiento. “Se insiste más en la programación física que en la programación de la alimentación y de la hidratación. Tienen que ser conscientes de que la nutrición también hay que entrenarla. Una alimentación adecuada mejora mucho, evita la fatiga y sobre todo que haya lesiones”, afirma el doctor.
Uno de los problemas más frecuentes en pruebas de largo recorrido es que aparecen lesiones, no por el ritmo durante el recorrido, sino por la alimentación antes, durante y después de la carrera. Al término de la competición existe un periodo de media hora donde es muy importante que el corredor consuma una gran cantidad de hidratos de carbono y proteínas para una buena recuperación muscular y evitar una alta probabilidad de daño muscular.
La dieta para un deportista tiene que ser una hoja de ruta que le acompañe durante todo el entrenamiento. Debe ser una dieta sana, variada, equilibrada y que cuente con todos los componentes de la alimentación. Es muy importante que incluya hidratos de carbono, almidones de absorción intermedia o absorción larga, frutas y verduras, así como proteína animal y vegetal. En este caso, las legumbres juegan un papel esencial.
El Dr. Llorente resalta que “al igual que el deportista diseña un plan para la carrera, hay que hacer lo mismo con la alimentación durante la actividad. Es importante que prepare los días anteriores al organismo para el esfuerzo físico al que se va a someter”.
Lo primero que hay que incluir en la dieta es más cantidad de hidratos de carbono que son los que van a aportar más energía en los primeros kilómetros. Un arranque de carrera que es importante entrenarlo en situación de déficit para aprovechar como fuente de energía las grasas que van a dar bastante rendimiento durante la carrera. Y a continuación entrenar lo que se va a comer en cada parada y en qué orden.
La importancia de una buena hidratación
Para un corredor es fundamental que tenga claro el perfil de la carrera (ruta, desniveles, cuándo realizar las paradas…). En resumen: hacer un plan ajustado al recorrido para que esté en todo momento hidratado y no se quede sin reservas de hidratos.
La hidratación es imprescindible en una carrera de larga distancia. La clave para un rendimiento correcto es salir muy hidratado e ir bebiendo de forma continuada durante el recorrido.
Los puestos de avituallamiento son un apoyo para el corredor, pero además debe ir equipado con líquido encima para ir bebiendo de forma progresiva.
El hecho de que un deportista se deshidrate va a determinar que tenga una disminución muy importante en el rendimiento deportivo durante una carrera. Además, en el caso de practicar un deporte con mucha intensidad, sí es importante añadir un suplemento vitamínico o de minerales y más de cara a un entrenamiento para una competición de alta intensidad.