Luis Campo, CEO de GE HealthCare Iberia, habla en esta entrevista de cómo contribuye la compañía a mejorar el sistema sanitario español gracias a contar con la última tecnología, así como los principales retos a los que se enfrentan ahora mismo.

¿En qué medida incide su actividad en el sector sanitario español?

Considero que nuestra contribución al desarrollo del sector sanitario español ha sido (y es) muy considerable, esperando que lo sea aún más en el futuro.

La tecnología de GE HealthCare está presente en prácticamente cualquier proceso asistencial. Hemos sido pioneros en el desarrollo de tecnologías en el ámbito del diagnóstico, cuidados críticos y soluciones digitales para mejorar los resultados clínicos y de eficiencia operativa. En la actualidad anhelamos ser el socio preferente en el “cuidado de precisión” (precision care), centrado en tres vectores fundamentales: diagnóstico, terapias y monitorización. Un tema de rabiosa actualidad donde esperamos convertirnos en un referente.

A lo largo de los años, hemos trabajado de forma muy cercana con los profesionales en el asesoramiento y apoyo para que la innovación tecnológica pueda ser incorporada en nuestro sistema de salud. Nuestra relación con las administraciones públicas, profesionales, hospitales, sociedades científicas, patronales, clínicas y grupos privados siempre se ha caracterizado por el deseo de colaborar. Tenemos múltiples ejemplos de proyectos que ilustran nuestra adaptación a las distintas circunstancias existentes en nuestro sector, realidad que considero una de nuestras grandes fortalezas y que ha influido en la confianza que se nos ha concedido.

En su dilatada trayectoria habrá hecho frente a múltiples cambios y a la implantación de muchas novedades y avances, ¿cuáles han sido los últimos y más destacados?

Como supongo responderían muchas personas de nuestro sector, el momento donde nos vimos obligados a adaptarnos al cambio de forma más acelerada fue el 2020. El Covid-19 nos cambió, dando una perspectiva y sentido a lo que hacemos como nunca había vivido antes. Fue un periodo que recuerdo con tristeza, pero también orgulloso de haber visto la mejor cara de la empresa a la que represento y de muchísimos profesionales a los que tengo el placer de conocer.

Otro momento de cambio que destacaría es el actual, por el dinamismo y evolución de innovación que estamos viviendo. A principios del 2023, GE HealthCare empezó a operar como una empresa independiente, tras la escisión de nuestra matriz General Electric (GE). El cambio le ha dado un mayor impulso al desarrollo de innovación; una circunstancia que también se ha traducido en la aceleración de adquisiciones que nos permitan ser un referente en medicina de precisión. Como ejemplo, solo en el primer trimestre del 2023, GE HeathCare anunció más adquisiciones que en los años 2021 y 2022 juntos. Las incorporaciones de IMACTI, en el campo del intervencionismo mínimamente invasivo, y Caption Health, para la detección temprana de enfermedades a través de inteligencia artificial aplicada en ecografía, se llevaron a cabo en el primer trimestre del 2023.

¿Cuáles son los puntos fuertes de la compañía? ¿Qué les diferencia del resto?

Destacaría dos aspectos: la presencia de nuestra tecnología en prácticamente todas las áreas asistenciales y nuestra cultura de empresa. También, como mencioné antes, nuestra flexibilidad y capacidad para adaptarnos a una gran variedad de modelos de colaboración que requieren nuestros clientes. 

GE HealthCare es una de las mayores empresas del sector de la salud a nivel global, con presencia en más de 160 países. Invertimos anualmente aproximadamente $1.000 millones en I+D+i, lo que nos permite liderar en muchas áreas en las que estamos presentes. Por ejemplo, en el ámbito del diagnóstico por imagen, somos una compañía que desarrolla equipos médicos a la vez que productos farmacéuticos (medios de contraste y radiofármacos). Esta singularidad nos permite tener una perspectiva muy profunda sobre las tendencias en diagnóstico por imagen y su confluencia con terapias avanzadas que jugarán un papel determinante en la medicina de precisión, como es la teragnosis. Otra área donde destacamos es en el desarrollo e incorporación de soluciones basadas en inteligencia artificial (IA) para uso clínico.

En octubre del año pasado, la FDA en EE. UU. publicó un listado de los 521 dispositivos médicos habilitados con IA, destacando GE HealthCare como la empresa con mayor número de autorizaciones, con 42. También destacamos en áreas menos conocidas, como proyectos de “centros de control” (Command Centers) para la gestión de hospitales, un tema que está generando muchísimo interés y donde tenemos más de 200 implantaciones a nivel global.

En el ámbito de “cultura de empresa” no puedo decir que sea mejor que la de otras, pero sí puedo afirmar que es el factor que ha influido más en que haya elegido quedarme más de 25 años en la misma compañía. Algunos de los aspectos que destacaría son la meritocracia, la informalidad en el trato entre empleados —no tenemos una organización donde la jerarquía condicione la expresión de ideas u opiniones— y la importancia que damos a que las personas puedan desarrollar su potencial profesional independientemente de su género, raza, edad o condición. En general, tengo la suerte de compartir muchas horas al día con personas que tienen pasión por lo que hacen y disfrutan de su trabajo.  

Los últimos años no han sido fáciles para muchas empresas, ¿cómo ha afrontado GE HealthCare los retos profesionales y económicos de la crisis?

GE HealthCare no ha sido ajena a la crisis global de suministro de componentes y encarecimiento de las materias primas. Dar respuesta a esta realidad, a la vez que prepararnos para la escisión como empresa independiente, supuso un reto y ocupó gran parte de nuestro tiempo en 2022.

En España, además, en el mismo año vivimos la mayor ola de inversión pública de nuestra historia a través del Plan de Inversión en Equipos de Alta Tecnología (INVEAT), financiado con fondos europeos. En un contexto de retos de suministro y dilatación en los plazos de entrega, nuestro esfuerzo en el último año se ha centrado, sobre todo, en cumplir con los compromisos adquiridos en materia de suministro de equipos. Por fortuna y mucho esfuerzo, las desviaciones que hemos tenido han sido mínimas.

¿Cómo valora la labor de IDIS?

La labor de la Fundación Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS) a lo largo de sus 13 años de historia ha sido inmensa. Desde el principio creímos en el proyecto y el papel fundamental que debía jugar para ayudar a fortalecer nuestro sistema de salud. Es por ello por lo que nos comprometimos con su desarrollo desde el primer momento. Nos gusta pensar que hemos contribuido, aunque sea con un granito de arena, en su progresión a lo largo de los años.