Martes, 20 de octubre de 2020   |  Número 129
La estandarización del proceso de sondaje urinario ayuda a prevenir las IRAS
Así lo ha demostrado un estudio realizado en área de Urgencias del Hospital Universitario de Bellvitge
Hospital de Bellvitge.

Las infecciones del tracto urinario (ITU) son el tercer tipo de infección hospitalaria más frecuente
en España y representan el 15-20% de las IRAS (2). El 70% están asociadas con un catéter uretral permanente, y es que el 16% de los pacientes hospitalizados son portadores de una sonda uretral en algún momento.

Un estudio realizado en el Área de Urgencias del Hospital Universitario de Bellvitge (Barcelona) durante 30 meses (junio de 2017-diciembre 2019), ha demostrado que la estandarización del proceso de sondaje urinario, acompañado de una formación continuada y de la adecuación de los productos involucrados, mejora el cumplimiento del protocolo, la satisfacción del personal sanitario, y, por lo tanto, la prevención de las IRAS.

Como medida preventiva para reducir las IRAS del tracto genitourinario, se implementó el Plan PrevenIRAS que ha trabajado en la estandarización del protocolo de sondaje urinario desde la óptica de seguridad del paciente, la formación de los profesionales en el nuevo protocolo, y la adecuación de los materiales.

Según datos del estudio, hasta el 65-70% de las ITU se consideran evitables, siempre que se implementen prácticas de prevención. Además, el riesgo de infección urinaria aumenta en relación con los días de sondaje vesical, ya que el sondaje vesical permanente incrementa el riesgo diario de infección urinaria un 5%. Otro factor que favorece las ITU es la calidad de los cuidados del personal sanitario en relación con la inserción y manipulación de la sonda.

El estudio preliminar ha demostrado que ha aumentado el cumplimiento de los pasos clave para la seguridad del paciente. Y es que la adherencia en la higiene de manos en los momentos recomendados por la OMS ha aumentado hasta 17 puntos, llegando a triplicar el cumplimiento en el momento previo a la tarea aséptica.

También se ha incrementado el cumplimiento del protocolo en momentos clave como ponerse los guantes, desinfectar la mucosa, insertar y fijar el catéter, o el momento de colocar la bolsa debajo de la vejiga.

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