La inteligencia artificial (IA) ayudará a prever las pandemias y los desastres naturales del futuro. Su valor predictivo es innegable en el mundo actual en el que vivimos de continuo cambio, impredecible y complejo, pero la IA está ganando presencia en nuestra vida diaria sin ser del todo conscientes del abanico de posibles usos que ofrece esta herramienta y cómo aprovechar al máximo el aprendizaje humano y la IA.  Así lo han puesto de manifiesto los expertos que se han reunido en el III Foro de I+D “Con vistas al futuro”, impulsado por Novo Nordisk.

Cada día los desafíos globales a los que nos enfrentamos como sociedad son más complejos y abundantes, y requieren de acciones inmediatas e ideas vanguardistas para ponerles solución. En este contexto, estos expertos en innovación de múltiples ámbitos han tenido la oportunidad de exponer y reflexionar en un espacio abierto y multidisciplinar sobre el potencial de la innovación para hacer frente a las necesidades presentes y a los retos futuros, tratando de marcar el rumbo hacia una sociedad más saludable y sostenible.

Para Novo Nordisk, la innovación es un aspecto esencial de su cultura corporativa, además de un motor del progreso social. Gracias a esta visión, la compañía cumple el hito de su centenario con algunos proyectos en IA en las diferentes etapas de desarrollo de un medicamento. Al respecto, Rodrigo Gribble, director general y vicepresidente corporativo de Novo Nordisk España, señala con orgullo: “la apuesta de la compañía por ser actor protagonista de la transformación digital del sector de la salud. Llevamos cien años manteniéndonos en la vanguardia del diseño y la implementación de soluciones punteras para las personas que viven con una enfermedad crónica grave, y con la ayuda de la IA nos proponemos acortar el largo camino que recorre un medicamento desde su descubrimiento hasta llegar a los pacientes”.

El encuentro ha constado de dos sesiones plenarias y tres córneres de debate, que han sido liderados por reconocidos expertos en diversos campos. En dichas reuniones, los participantes han podido debatir sobre cómo y con qué herramientas están abordando cada uno de ellos los retos globales en materia social, sanitaria y de sostenibilidad.

Como se ha puesto de manifiesto, una de las herramientas que más han empleado los expertos ha sido la IA, una protagonista indiscutible de este encuentro. Sus aplicabilidades son infinitas: desde identificar desigualdades sociales hasta ayudar con las planificaciones de las ciudades y su transporte para que sean más sostenibles. “La IA está teniendo una integración excepcionalmente útil en diversos sectores como el de la automoción, las finanzas, la energía, la educación y la agricultura, entre muchos otros. Todo esto se debe a la capacidad de la herramienta para automatizar tareas, analizar grandes volúmenes de datos y tomar decisiones precisas”, tal y como ha afirmado Roberto Menéndez, CEO digital de FUTURA VIVE y experto internacional en IA, metaversos empresariales, robótica y competencias digitales.

El futuro de la atención sanitaria: la IA

Idoia Salazar, cofundadora y presidenta del Observatorio del impacto social y ético de la inteligencia artificial (OdiseIA) y experta en el observatorio de IA del Parlamento Europeo (EPAIO), ha señalado que, “debido la representación mediática, la confianza del público general, a menudo, oscila entre la utopía y la distopía. En cambio, en las áreas en las que la herramienta ha demostrado ser altamente eficaz, la confianza tiende a ser alta, debido a la consistencia y la precisión demostradas”. La experta ha destacado que el ámbito de la salud es uno de los más avanzados en cuando a la integración de la herramienta: “ha transformado el diagnóstico médico y el desarrollo de tratamientos”.

En este sentido, Idoia Salazar ha llamado la atención sobre el diagnóstico por imagen como una de las aplicabilidades más relevantes de la IA en salud: “ha demostrado ser extremadamente eficaz en la interpretación de imágenes médicas, ya que los algoritmos avanzados pueden detectar anomalías en radiografías, resonancias magnéticas y tomografías con precisión, en muchas ocasiones rivalizando o superando la capacidad de los especialistas humanos”. Así, esta experta hace referencia a un estudio publicado en la revista "Nature" en enero de 2020 el cual asegura que un algoritmo de IA desarrollado por Google Health podía detectar el cáncer de mama en mamografías con una precisión superior a la de los radiólogos humanos.

“La personalización de los tratamientos también ha mejorado gracias a la integración de la IA, mejorando su eficacia”, tal y como ha indicado Roberto Menéndez. “Los algoritmos pueden analizar datos del paciente y adaptar tratamientos específicamente a sus necesidades reduciendo posibles efectos secundarios. Además, puede liberar al médico de tareas rutinarias y repetitivas, permitiendo que dediquen más tiempo a la interacción humana y a la toma de decisiones”.

En cuanto a los medicamentos, Idoia Salazar comenta que, “la IA ha acelerado el descubrimiento y el desarrollo de nuevos fármacos, debido a que permite analizar complejas interacciones bioquímicas y predecir cómo diferentes compuestos pueden afectar a enfermedades específicas”.

En definitiva, la innovación es un aspecto crucial para enfrentar las dificultades que asoman en el horizonte, y ambos expertos han coincidido en la importancia de invertir en investigación y desarrollo, además de la colaboración entre diferentes actores, para favorecer un entorno propicio para que se dé esta innovación. En cuanto a la IA, los ponentes han asegurado que tiene el potencial de impulsar mejoras significativas en la calidad de vida y el bienestar de las comunidades a nivel global, siempre que se use de manera correcta, aunque aún quedan por delante desafíos importantes por resolver, como su ética o la seguridad y la privacidad de los datos que maneja, tal y como afirma Roberto Menéndez.