Situar al paciente en el centro y gestionar sus problemas debería ser el eje vertebral de cualquier sistema sanitario. Sin embargo, actualmente hay muchos datos y de distintas fuentes que impiden que la información se organice alrededor de los pacientes. En este sentido, “es necesario poder disponer de la información tanto dentro como fuera del entorno asistencial y que todos los agentes dentro de sistema sanitario estén conectados en un mismo punto para acceder a toda la información disponible del paciente”. Así lo ha señalado Luisa Bautista Gómez, portavoz de Accenture, durante su participación en el último Comité de Innovación del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS).
El secretario general de la Fundación IDIS, Ángel de Benito, reconoció las grandes ventajas que suponen los modelos interoperables para mejorar la eficacia, eficiencia y efectividad de los servicios sanitarios. De ahí la relevancia de continuar trabajando en su implantación paulatina en los sistemas sanitarios.
Actualmente existe información clínica fragmentada que procede de distintos sitios y es incompleta. A todo ello se une el hecho de que el entorno sanitario es complejo y que existe escasa información contextual del paciente, lo que pone en evidencia una visión parcial, más manifiesta con la llegada de la COVID-19. Luisa Bautista ha señalado que “es necesario romper las barreras de forma no intrusiva para poder conectar las distintas piezas del entorno, debido a que, si existe un entorno colaborativo, será más fácil compartir información”. En este sentido, ha explicado que lo ideal sería tener una ficha médica integrada del paciente con datos genómicos, sociales, de comportamiento, etc. procedentes de distintos dispositivos. El objetivo es analizar, identificar a los pacientes de riesgo, registrar un plan personalizado de cuidados, controlar dicho plan y su progresión y poder interactuar con los distintos agentes (médico, cuidador, fisioterapeuta, farmacéutico, etc.) a través de inteligencia artificial para llevar a cabo la ejecución de los cuidados.
Durante la sesión se presentó una herramienta para poder llevar a cabo este proceso de integración de datos de salud, que permite a su vez un entorno de trabajo abierto para los usuarios y una plataforma de desarrollo para consumo de información. Por otro lado, también se presentó otra herramienta que permite filtrar y hacer un cohorte con pacientes que tengan determinadas patologías e interacciones con distintos profesionales, lo que permite hacer un seguimiento en tiempo real sobre todo lo que ocurre en cada una de las etapas. En este contexto de interacción, explicaron un caso de éxito en Noruega, donde están llevando a cabo un proyecto de E-Health que se basa en una plataforma central de datos y una infraestructura analítica común y de la que se espera su implementación en 2-3 años.