MSD es una de principales compañías farmacéuticas del mundo. En 2019 destinó 9.900 millones de dólares a proyectos de I+D a nivel global, lo que da buena muestra de su apuesta por la innovación y la investigación. Ana Argelich, presidenta y directora general de MSD en España, explica en esta entrevista para la 'Publicación de Sanidad Privada' la importancia de la innovación y de apostar por las vacunas, la intervención sanitaria más costo-efectiva que existe. Además, analiza las acciones tomadas por el laboratorio ante la pandemia de coronavirus Covid-19.
¿Cuáles son los valores que definen a MSD?
En MSD nos guiamos por la ética y la integridad, la transparencia y el respeto por las personas, y nos dedicamos a la innovación desde la excelencia científica, enfocándonos en los pacientes. Estos son los valores que nos definen, que marcan nuestro carácter como empresa y que guían todas nuestras decisiones y acciones.
¿Qué ha supuesto la crisis del coronavirus para su compañía farmacéutica?
A nivel de funcionamiento como compañía, desde que comenzó esta crisis tomamos las medidas necesarias para poder seguir desempeñando nuestra actividad con seguridad y así seguir respondiendo a las necesidades de los pacientes, sirviendo a los hospitales y a las farmacias. Como en MSD ya teníamos implantada desde hace tiempo la flexibilidad laboral, todos nuestros equipos han podido teletrabajar desde el primer momento, excepto lógicamente los empleados de la fábrica de Salud Animal de Salamanca cuyo trabajo es presencial. Para ellos se reforzaron todas las medidas de seguridad necesarias y específicas, y eso permitió que se pudiese seguir produciendo las vacunas y productos de uso veterinario que se exportan desde Salamanca a más de 50 países en todo el mundo.
Por otra parte, a nivel de investigación, hemos apostado por la colaboración, estableciendo diferentes acuerdos de investigación frente a la COVID-19, tanto para el desarrollo de una vacuna experimental (a través del acuerdo con IAVI y de la adquisición de Themis), como para el desarrollo de un candidato antiviral para el tratamiento de pacientes con COVID-19 (acuerdo con la empresa biotecnológica Ridgeback Biotherapeutics LP). Y todo ello, con el compromiso de que los avances que logramos estén accesibles y sea asequibles en todo el mundo.
También nos hemos unido a diferentes instituciones públicas y privadas como la Fundación Bill y Melinda Gates y el consorcio de compañías innovadoras que están trabajando para encontrar respuestas terapéuticas y preventivas frente a la Covid-19, así como a ACTIV (la Iniciativa para Acelerar las Intervenciones Terapéuticas y las Vacunas frente a la COVID-19) liderada por los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos (NIH).
Asimismo, hemos establecido una nueva colaboración con el Instituto de Biología de Sistemas en Seattle, Estados Unidos, para definir los mecanismos moleculares de la infección por el SARS-CoV-2 e identificar posibles biomarcadores con valor pronóstico, unos conocimientos que podrán usarse para contribuir al diseño de vacunas y tratamientos con anticuerpos.
¿En qué medida la pandemia actual ha reforzado la importancia o necesidad de inmunización?
Parece mentira que hoy en día todavía sea necesario recordar y remarcar que no hay intervención sanitaria preventiva más costo-efectiva que la vacunación, que evita entre dos y tres millones de muertes anuales por difteria, tétanos, tos ferina y sarampión, entre otras enfermedades. Tal y como asevera la OMS, si se mejorase la cobertura vacunal mundial se podrían evitar 1,5 millones de muertes.
Creo que esta pandemia por la COVID-19 ha puesto de manifiesto por un lado la importancia de la inversión y la investigación centrada en el desarrollo de nuevas vacunas, y por otro la necesidad de seguir reforzando los programas de inmunización.
¿Cómo afronta el futuro MSD?
Con ilusión y compromiso con la sociedad. Nuestro lema es “inventando para la vida” y eso es lo que seguiremos haciendo los próximos años.
Para ello seguiremos apostando por la investigación, la inversión en I+D+I, la colaboración público-privada y el desarrollo de nuestros programas de responsabilidad social corporativa (RSC) de largo alcance. Todas estas áreas han sido clave para la Compañía desde su origen y tras la pandemia mundial a causa de la COVID-19 seguirán siéndolo.
Creo que debemos intentar sacar enseñanzas de lo vivido, aprovechar las lecciones que nos ha dado esta grave situación y que van a modificar nuestro modo de vida, por ejemplo, en el modo en el que nos enfrentamos a enfermedades emergentes o en nuestra manera de trabajar, en la que se integrará definitivamente la flexibilidad y el teletrabajo, gracias a la transformación digital.
¿Cuáles son las apuestas del laboratorio en cuanto a innovación para los próximos años?
Como comentaba, para nuestra Compañía, la innovación es claramente una de nuestras señas de identidad, como refleja la apuesta en I+D+i que hacemos.
En 2019 destinamos 9.900 millones de dólares a proyectos de I+D a nivel global, lo que hizo que nuestra compañía fuera una de las empresas líderes en número de ensayos clínicos en marcha. En este sentido, cabe señalar que MSD en España es la subsidiaria de la Compañía que ocupa el primer puesto europeo en número de ensayos clínicos, con un crecimiento del 23% durante el año 2019. Nuestra subsidiaria participa en más del 80% de los ensayos clínicos de la empresa a nivel global y es la primera subsidiaria europea de MSD por el volumen de estudios para el registro de medicamentos.
Actualmente la Compañía cuenta con 17 programas en fase II de investigación, 25 programas en fase III de investigación y dos moléculas en proceso de revisión por las autoridades sanitarias.
En el área concreta de la Oncología, MSD tiene el mayor programa de investigación clínica en inmunooncología de la industria, con más de 1.200 ensayos que evalúan pembrolizumab en una amplia variedad de cánceres y contextos de tratamiento.
Y en el contexto actual, seguiremos apostando por la investigación en vacunas, aprovechando nuestra amplia y sólida experiencia en la búsqueda de candidatos a vacunas, como la vacuna contra el ébola, aprobada el pasado año.
Los esfuerzos realizados en el desarrollo de la vacuna del ébola y los actuales frente a la COVID-19 responden al compromiso de la Compañía con la salud pública, donde las vacunas desempeñan un papel fundamental.
¿Cómo valoran en MSD el trabajo que lleva a cabo el IDIS -Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad?
Consideramos que la labor de IDIS es clave como se viene demostrando anualmente a través de la consecución de resultados en términos de reputación sectorial y de la integración de la sanidad privada en la planificación asistencial de la población. Valoramos su implicación y compromiso con la Sanidad, así como su objetivo de contribuir al bienestar de las personas.
Este año 2020 ha sido especial, y han demostrado su capacidad de reacción ante la situación generada por la COVID-19, con un plan de choque para poner en valor la actividad e iniciativas de sus miembros, y ofrecer a la sociedad y las instituciones la labor del sector privado que, junto con la sanidad pública, ha sido un actor clave antes, durante y después de la pandemia. Todo ello ha reforzado la figura de la Fundación IDIS como agente aglutinador del sector privado en España, lo que también se ha demostrado al poner en marcha el espacio web coronavirus.fundacionidis.com, en el que se plantean propuestas a las autoridades para mejorar el sistema sanitario y avanzar en la “nueva normalidad”.