En el marco de la Semana Mundial de Concienciación sobre las Resistencias Antimicrobianas (RAM), la magnitud de este desafío queda reflejada en datos como los del estudio BMR 2023 de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), que señala que, en España, por cada muerte en 2023 por accidentes de tráfico, se produjeron 20 muertes por infecciones por bacterias multirresistentes. Ante esta situación, el doctor Francisco J. Membrillo, experto en enfermedades infecciosas, advierte: “Tenemos que entender que los antimicrobianos son medicamentos diferentes a todos los demás. La decisión sobre poner o no un antibiótico, ya sea en un paciente humano o animal, tiene un impacto sobre toda la comunidad, favoreciendo la aparición de resistencias”.
En esta línea, Cristina Nadal, directora ejecutiva de Government Affairs de MSD en España, destaca que “la resistencia antimicrobiana no sólo compromete nuestra capacidad de tratar infecciones comunes, sino que también pone en riesgo los avances médicos que hemos logrado en las últimas décadas. Para hacer frente a ese reto, es necesaria la planificación y una acción coordinada y conjunta”.
Actualmente, MSD es una de las compañías que mantienen sus inversiones de I+D en el desarrollo de medicamentos y vacunas para prevenir y tratar infecciones. Asimismo, impulsa acciones de concienciación e iniciativas sobre la importancia del uso responsable de los antimicrobianos, además de fomentar actividades o colaboraciones con el ámbito universitario y otras que buscan fomentar vocaciones científicas en este campo.
Un reto global con soluciones coordinadas
La resistencia antimicrobiana representa un desafío complejo que abarca los ámbitos social, profesional, académico y gubernamental. Su abordaje exige un enfoque integral basado en la salud global y el concepto One Health, considerando las interconexiones entre la salud humana, animal y medioambiental, donde la clave para superarlo radica en una coordinación efectiva y en la colaboración multidisciplinar.
Es por este reto que el doctor Membrillo enfatiza la importancia de un enfoque One Health: “Pensemos que, por ejemplo, si damos a todo el ganado antibióticos para mejorar su crecimiento y disminuir riesgo de enfermedades, esa estrategia va a incrementar, y esto está demostrado, el riesgo de resistencias antimicrobianas en las bacterias de las personas que consumen esta carne. Por eso, es fundamental mejorar, en primer lugar, la formación de todas estas profesiones sanitarias, y en segundo lugar favorecer y crear foros para que todas esas profesiones interactúen frecuentemente y puedan aprender unas de otras”.
Entre las estrategias clave destaca la necesidad de fomentar la prevención, el uso adecuado de medicamentos y la búsqueda de soluciones innovadoras. Joaquín Mateos, director médico de MSD España, subraya: “Debemos actuar desde todas las áreas. Desde la medicina hasta la política sanitaria, pasando por la investigación y la educación, es necesario impulsar una visión integral que conecte las disciplinas. Solo así podremos frenar el avance de las resistencias y proteger el futuro de la salud global”.
El compromiso de todos con el cambio
En este contexto, la doctora María Teresa Rodríguez, médico adjunto de la Unidad de enfermedades Infecciosas del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo, recalca el papel de los profesionales de la salud en la educación de la población: “Necesitamos recordar en primer lugar a los profesionales sanitarios y, por supuesto, también a los usuarios, que los antibióticos son un recurso excelente, pero limitado y que su mal uso puede conducirnos de nuevo a la era pre-antibiótica”.
Asimismo, la doctora incide en la necesidad de la educación en este aspecto: “Creo que sería muy importante empezar a transmitir la importancia del uso adecuado de los antibióticos desde la escuela. ¿El reto? llegar a cambiar la visión sobre los antibióticos y hacer a cada persona más consciente de su papel en el uso adecuado de estos fármacos”.
Para Joaquín Mateos “es un desafío que requiere de un enfoque conjunto y coordinado. Por eso, es esencial fortalecer la colaboración entre las distintas disciplinas de la salud y promover un uso más responsable de los antibióticos en todos los ámbitos, desde la medicina hasta la agricultura. Como líder comprometido en la lucha contra la resistencia antimicrobiana, MSD reafirma su propósito de proteger los avances médicos y la salud de las generaciones futuras, con una estrategia que combina investigación, acción global y educación”.