El entorno asistencial privado no es simplemente un complemento, sino que es un agente esencial que desempeña un papel vital en la construcción de un sistema de salud integral y equitativo en nuestro país. Su capacidad para generar valor económico, crear empleo cualificado, impulsar la innovación y mejorar la eficiencia y la asistencia sanitaria tiene un impacto positivo en la salud pública, contribuyendo a un entorno más accesible y sostenible para el Sistema Nacional de Salud. “El papel del sistema sanitario privado es obvio, como queda demostrado en este informe y, además, el sistema público y el privado son vasos comunicantes entre sí, por lo que si a uno le va mal al otro también y viceversa. En este sentido, reivindicamos aprovechar las sinergias y recursos de ambos sistemas según se puedan necesitar para tener un sistema más accesible, más resiliente, y más robusto que permita dar servicio a los pacientes.
Así pues, pedimos normalizar el desempeño del sector privado en el panorama sanitario de nuestro país, como sector consustancial al sistema, si es preciso mediante la promoción de un nuevo acuerdo marco entre las partes que garantice la seguridad y la transparencia. No podemos olvidar que la propia demanda sanitaria es la que hace imprescindible la colaboración entre las dos titularidades”. Así lo ha asegurado Juan Abarca, presidente del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS), durante la presentación del Observatorio del sector sanitario privado 2024, un documento que hace una fotografía del sector sanitario privado para conocerlo, evaluar su evolución y observar tendencias, además de un análisis -con fuentes oficiales y fuentes propias- de la imprescindible contribución del sector privado al Sistema Nacional de Salud. Para ello, analiza su peso en el sector productivo, la liberación de recursos de la sanidad pública, la mejora de la accesibilidad, el desarrollo de la investigación y la actividad de alta complejidad o el impulso del empleo y de la calidad, entre otros aspectos.
El análisis global de la aportación de los datos de 2024 muestra que el sector sanitario privado representa un elevado peso en el sector productivo español. De hecho, “alcanza los 36.805 millones de euros -el 28,4% del gasto sanitario total-” afirma la directora general de la Fundación IDIS, Marta Villanueva, “lo cual supone el 3,05% del PIB; que sumado al 0,76% del gasto público en provisión privada, nos lleva a un 3,81%”.
La aportación del sector privado se observa asimismo en la liberación de recursos a la sanidad pública gracias a los más de 10,7 millones de asegurados (excluyendo los mutualistas), que no consumen -o lo hacen de forma esporádica- los recursos del Sistema Nacional de Salud. Se calcula que el gasto en salud por el aseguramiento privado es de 6.701 millones de euros, en base a los siniestros de las compañías aseguradoras. Por otro lado, es destacable el crecimiento del número de asegurados, ya que en el año 2023 se han superado los 12 millones -contando con los mutualistas-, lo que supone un incremento (tasa anual compuesta) de un 3,88% entre 2018 y 2023. Respecto al volumen de primas, se estima que en 2023 han alcanzado un importe de 10.751 millones de euros, lo que supone un incremento del 5,53%.
Otro de los aspectos que analiza el informe es la accesibilidad de la población a la asistencia sanitaria. Actualmente, el sector cuenta con 438 hospitales privados (que representan el 57% total de centros hospitalarios), lo que corresponde a una dotación de 50.574 camas (32% del total de camas existentes en España). A nivel geográfico, Cataluña, Madrid y Andalucía se mantienen como las comunidades autónomas que cuentan con un mayor número de camas privadas.
Además, de manera global, el sector llevó a cabo el 32,6% de las intervenciones quirúrgicas (41,3% si tenemos en cuenta además parámetros como los conciertos sustitutorios y la red de utilización pública); registró el 22,6% de las altas (29,6% si atendemos a los parámetros anteriores); y atendió el 25,2% de las urgencias (31% en caso de incorporar esos mismos parámetros). El sector privado mejora la accesibilidad, por otra parte, aportando la tecnología más avanzada y cuenta con el 52% de los equipos de resonancia magnética, el 50% de los de litotricia y el 43% de los mamógrafos.
Salud mental
El informe muestra que la sanidad privada juega un papel esencial en el ámbito de la salud mental, concentrando el 70% de los hospitales especializados en salud mental y tratamiento de toxicomanías, y el 49% de centros de salud mental sin internamiento. En esta línea, es destacable que más de la mitad de las unidades de psicología clínica y psiquiatría en hospitales se encuentran en hospitales privados. Tal y como explica la directora general de la Fundación IDIS, “el porcentaje de unidades de psicología clínica y psiquiatría pertenecientes a hospitales privados se sitúa en el 52% desde 2018. Solo en los últimos 4 años la oferta asistencial de psicología clínica y psiquiatría ha aumentado en 19 unidades, y presenta una tasa de crecimiento anual compuesto del 0,8%”.
Agente esencial del sector público
El sector sanitario privado es una parte imprescindible dentro del sistema sanitario, siendo la cooperación con el sector privado (a través de conciertos, mutualismo administrativo y concesiones) un pilar esencial para descargar de presión asistencial y financiera a la sanidad pública. A este respecto, el SNS concierta actividad con el 63% de los hospitales privados. De esta forma hay 172 hospitales con concierto, 98 de la red hospitalaria de utilización pública de Cataluña y 6 de la red hospitalaria de utilización pública de otras Comunidades Autónomas.
Por su parte, el mutualismo administrativo es un mecanismo de cobertura que favorece el equilibrio entre el sistema público y el privado, al tiempo que reduce la presión asistencial de la demanda de pacientes en el sistema público de salud. En 2023 1,6 millones de funcionarios, aproximadamente el 78% del total, estaban suscritos a esta modalidad. Además, la estimación del gasto público per cápita corresponde a 1.736 euros, frente a los 1.030 euros del mutualismo administrativo.
Empleo, calidad asistencial e investigación
Son destacables en este Observatorio del sector sanitario privado 2024 algunos datos en relación con la generación de empleo y la formación los profesionales sanitarios. “En nuestro país emplea aproximadamente a 300.226 profesionales, de los cuales 69.052 son médicos. Además, la sanidad privada pone de manifiesto su compromiso con los profesionales sanitarios a través de su formación. En 2024 el sector sanitario privado ofertó 272 plazas de formación sanitaria especializada, consciente de la importancia y las necesidades en formación”, afirma la directora general de la Fundación IDIS.
Con el fin de mejorar y demostrar la calidad de sus centros, el sector sanitario privado cuenta con diferentes certificaciones que acreditan la calidad de estos. Además, la Fundación IDIS puso en marcha hace años el Reconocimiento QH, que hoy en día ostentan 170 centros, 125 de los cuales son privados.
Por último, y en relación con la investigación, es destacable que en el periodo 2016 – 2023 un total de 137 centros privados participaron en el desarrollo de algún ensayo clínico, lo que supone el 30% del total de centros. Estos centros han participado de alguna manera en 948 ensayos clínicos con una tasa de reclutamiento del 121%.
“Todos estos datos y este análisis de cómo impacta la actividad y solvencia del sector privado en la mejora de la asistencia sanitaria hacen que su compromiso sea cada día más firme y su contribución más reconocida; sin duda, un año más, desde la Fundación IDIS queremos trasladar la robustez de la sanidad privada en su conjunto para crear, de forma integrada, un sistema que se sustente en la cooperación, en el aprovechamiento de todos los recursos disponibles y en el beneficio del paciente como prioridad”, concluyó Marta Villanueva.