El sentimiento de soledad, que suele venir acompañado de incertidumbre y angustia ante situaciones de carencia de apoyo social o familiar, se relaciona con un mayor riesgo de mortalidad y eventos cardiacos. Así lo advierte el especialista en Cardiología del Grupo Hospiten, el doctor Antonio Ramírez, tal y como se refleja en diversos estudios clínicos publicados en revistas científicas de prestigio durante los últimos años.
“Esta relación se ha visto incrementado en las circunstancias actuales que vivimos, sobre todo durante el confinamiento y las medidas de distanciamiento social recomendadas, que han provocado que muchas personas experimenten un fuerte sentimiento de soledad durante este periodo”, explica el doctor Ramírez.
Según la Encuesta Continua de Hogares de 2019 en España hay más de dos millones de personas con más de 65 años que viven solas y más de la mitad son mujeres. Para el especialista de Hospiten “sí que hay una oportunidad de cambiar esta evidencia, ya que está en nuestra mano intentar revertir los efectos negativos de la soledad. Hoy en día el uso de telecomunicaciones y redes sociales a nivel colectivo y familiar nos puede permitir mantener un contacto afectivo no presencial con nuestros seres queridos para sentirnos acompañados y prevenir con ello todas las consecuencias negativas de los sentimientos de aislamiento y soledad”.
“En este sentido, dotar a nuestros mayores de tecnología y conocimiento para interactuar puede ser otra herramienta más que mejore su bienestar psicológico y físico, lo cual también repercutirá en la salud de toda la población”, añade.