Cada año la inmunización permite evitar de 2 a 3 millones de muertes en todo el mundo y se la reconoce ampliamente como una de las intervenciones de salud pública más exitosas y coste-efectivas. De hecho, si se mejora la cobertura vacunal mundial, se podrán evitar otros 1,5 millones de defunciones.
Especialmente este año – que ha estado precedido por la pandemia del SARS-CoV-2 – la compañía biofarmacéutica MSD con el apoyo de 52 entidades de diversa índole, quieren recordar con el lema ‘InmUNIDAD, sin unidad no hay inmunidad’ la importancia de cooperar para reforzar los programas de vacunación y alcanzar altas coberturas que favorezcan la inmunidad colectiva necesaria para frenar la transmisión de los virus y las bacterias. Se trata del cuarto año que la compañía biofarmacéutica MSD se une a la Semana Mundial de la Inmunización, impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que tendrá lugar del 24 al 30 de abril.
“Detener la propagación de enfermedades infecciosas es uno de los trece retos más urgentes identificados por la OMS para mejorar la salud mundial. La vacunación es l mejor herramienta para prevenir algunas enfermedades infecciosas y es una de la medidas de salud pública que más vidas ha salvado a lo largo de la historia. Por ello, debemos seguir invirtiendo en la investigación y desarrollo de vacunas efectivas contra los principales patógenos”, subraya Manuel Cotarelo, responsable del área médica de Virología y Vacunas en MSD- España.
“Afortunadamente, en la actualidad existen más de 40 vacunas que contribuyen a la prevención de 25 enfermedades evitables4. Además, contamos con un calendario común que contempla la importancia de la prevención a lo largo de todas las etapas de la vida. A pesar de ello, no podemos bajar la guardia si queremos ganar la batalla a las enfermedades infecciosas y evitar brotes, epidemias y pandemias”, subraya Manuel Cotarelo.
“Una persona infectada puede trasmitir una enfermedad desde casi cualquier parte del planeta hasta cualquier otra en 1-2 días. La pandemia por la infección SARS-COV-2 es una buena prueba de ello, además de los últimos casos epidémicos registrados en el continente europeo. Las enfermedades infecciosas no entienden de fronteras”, explica Manuel Cotarelo.
El valor de la inmunización: responsabilidad y unidad
Las vacunas previenen 60 muertes por hora en todo el mundo. Se encargan de adiestrar y preparar las defensas naturales del organismo - el sistema inmunitario- para que reconozcan y combatan virus y bacterias. De esta forma, cuando el organismo se ve expuesto a esos agentes patógenos, ya está preparado para neutralizarlos y así evitar la enfermedad.
“Las vacunas también son solidarias”, afirma el doctor Raúl Ortiz de Lejarazu, profesor de Microbiología y consejero científico del Centro de Gripe de Valladolid. “Cuando una persona se vacuna contra una enfermedad infecciosa, su riesgo de infección también se reduce, por lo que es mucho menos probable que transmita el agente infeccioso a otras personas. Por lo tanto, cuantas más personas de una comunidad se vacunen, la inmunidad de grupo aumentará y más se reducirán las probabilidades de que una persona infectada transmita el agente patógeno a otras”, explica el Profesor de Microbiología Raúl Ortiz de Lejarazu, consejero científico del Centro de Gripe de Valladolid.
“Lograr una inmunidad colectiva poblacional es fundamental para evitar la difusión de enfermedades infecciosas, pero también para proteger a las personas más vulnerables que cuentan con un sistema inmune más debilitado como son los niños, las personas mayores o con patologías de base y aquellas otras que por diferentes motivos clínicos no pueden ser vacunadas”, destaca el profesor.
Inmunización: ¿una tendencia a la baja?
Los datos del estudio de la Organización Mundial de la Salud y Unicef: Progress and Challenges with Achieving Universal Immunization Coverage, reflejaron que los países europeos fueron los que mejor cobertura de vacunación DTP (difteria, tétanos y tos ferina) en población infantil registraron entre los años 1980 y 20198. Sin embargo, los últimos datos publicados en el año 2019 en España por el Ministerio de Sanidad demostraron que no se cumplía el objetivo de alcanzar y mantener coberturas de vacunación ≥95 % con dos dosis de triple vírica. Y que incluso había comunidades autónomas con coberturas por debajo del 90%.
Además, los datos preliminares del estudio de la OMS y UNICEF sobre la cobertura vacunal de DTP correspondientes al año 2020, mostraron una disminución mundial del número de niños vacunados tras la pandemia por la infección del SARS-COV-2.
A la vista de estos datos, los expertos reunidos recalcan la importancia de recuperar las coberturas vacunales perdidas durante la pandemia para seguir garantizando la salud y la protección de la población infantil. También es importante destacar que la vacunación no sólo se dirige a la edad pediátrica, sino que también protege frente a enfermedades infecciosas en la edad adulta. A finales de 2018, el Ministerio de Sanidad presentó el documento “Vacunación en población adulta” que actualizó las recomendaciones de vacunación en población general adulta sana.
En esta misma línea, se publicó también el documento “Vacunación en grupos de riesgo de todas las edades y en determinadas situaciones”, que hace hincapié en los profesionales sanitarios, afectados de inmunodeficiencias y enfermedades crónicas, trabajadores y personas con conductas de riesgo, entre otros colectivos. “La novedades que se expusieron en los documentos sobre vacunación en grupos de riesgo y en población adulta, junto al calendario infantil, conforman el calendario de vacunación a lo largo de toda la vida”, comenta el doctor Raúl Ortiz de Lejarazu.
“Como adultos debemos concienciarnos de la importancia de asumir un papel activo y responsable en el autocuidado de nuestra salud. En este sentido, la vacunación forma parte de un estilo de vida saludable, y es tan importante para nuestra salud como una dieta adecuada o el ejercicio físico”, concluye el experto.
El gran enemigo de la inmunización: la desconfianza en las vacunas
Bajo el lema Las vacunas nos acercan, la Semana Mundial de la Inmunización 2021 instará a un mayor compromiso en torno a la inmunización a nivel mundial para promover la importancia de la vacunación para unir a las personas y mejorar la salud y el bienestar de todos.
En este sentido, uno de los objetivos de la OMS es atajar las enfermedades infecciosas . Es necesario, entre otras cuestiones, llevar a cabo una labor más robusta de inmunización sistemática.
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicado en marzo, confirmó que un 82,5% de los encuestados estaría dispuesto a recibir la vacuna frente a la COVID-19. El estudio reveló que la principal razón que alegaron las personas que no quieren inmunizarse frente a la COVID-19 es la desconfianza en las vacunas (29,3%), seguida por el miedo a los efectos secundarios (20,1%).
“El perfil de seguridad de las vacunas se vigila estrictamente desde la fase de desarrollo clínico hasta la fase de comercialización mediante estrictos controles de farmacovigilancia”, explica el doctor Federico Martinón-Torres, doctor en Pediatría e investigador clínico y jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Clínico Universitario de Santiago.
Todos estamos expuestos diariamente a un enorme caudal de información, no siempre fiable, sobre la COVID-19. Queremos entender el mundo que nos rodea y estar al corriente de los problemas que afrontamos y la manera de solucionarlos. Uno de los medios que tenemos para hacerlo es mediante la búsqueda y el intercambio de información, muchísima información. A todo esto se llama infodemia: un torrente de información sobre la pandemia de COVID-19 “Para hacer frente a esa infodemia, la OMS ha elaborado una serie de consejos para identificar la información errónea o la desinformación: evaluar la fuente, ir más allá de los titulares, identificar el autor para considerar su credibilidad, comprobar la fecha para ver si el artículo es reciente, examinar que los datos son probatorios y por lo tanto se sustenten las afirmaciones, olvidar los prejuicios y consultar a instituciones que verifican la veracidad de la información”, explica el doctor Martinón-Torres. “Con todo lo que escuchamos y leemos, es normal tener dudas y miedo, pero lo verdaderamente importante es tomar la decisión correcta a pesar de ello, mediante información fiable y veraz”, recalca.
“Las vacunas son productos a los que se les exigen unos elevados estándares de seguridad”, concluye el experto.