Según datos de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) el 60% de los pacientes oncológicos va a necesitar la radioterapia en algún momento de la evolución de su enfermedad y en el 40% de los casos, se consigue la curación completa. Asimismo, en aquellos casos en los que la curación ya no puede ser el objetivo, la radioterapia aporta beneficios sintomáticos, mejorando la calidad de vida de los pacientes.

Dentro de las diferentes opciones de radioterapia, se encuentra la terapia de electrones, donde la tecnología FLASH está abriendo nuevos horizontes. Para ello es fundamental los avances realizados por compañías como la estadounidense IntraOp que gracias al ensayo clínico Impulse, es la única que actualmente ofrece el tratamiento de radioterapia FLASH con un acelerador lineal de electrones.

Este ensayo, dirigido por el profesor Jean Bourhis (CHUV, Suiza) es el primero en el mundo en evaluar el potencial de aprovechar el efecto FLASH para proporcionar radioterapia con intención curativa a los cánceres radio-resistentes. IntraOp colabora con las principales instituciones y centros de investigación de todo el mundo tales como: CHUV, Universidad Estatal de Ohio, CHUM, MD Anderson Cancer Center, Hospital Universitario de Heidelberg e Instituto Jules Bordet todo con el objetivo de avanzar en el desarrollo y en la investigación de la terapia FLASH, centrándose en estudios traslacionales.

Además de la tecnología FLASH, más de 25.000 pacientes han recibido ya tratamiento con IntraOp Mobetron. Mobetron es el primer acelerador lineal de haz de electrones (LINAC) móvil y autoprotegido, diseñado para administrar radioterapia intraoperatoria (RIO). Este equipo aporta una radiación segura, fiable y portátil al quirófano, sin necesidad de costosas renovaciones o adaptaciones de blindaje.

La radioterapia intraoperatoria presenta grandes ventajas para el paciente al permitir administrar altas dosis de radioterapia, justo en el lecho quirúrgico que queda tras extirpar el tumor. De esa forma, se dirige la radiación con precisión la vez que se protegen los tejidos sanos adyacentes, minimizando los efectos secundarios.

Este tipo de terapia está indicado para pacientes con cáncer de: mama, páncreas, colorrectal, ginecológico, cabeza y cuello y sarcomas. Además, también permite el tratamiento sin cirugía del cáncer de piel (no melanoma).

La tecnología de IntraOp ya está disponible en España gracias a un acuerdo de distribución con la multinacional asturiana MBA SURGICAL EMPOWERMENT.