El Servicio de Radioterapia del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa ha puesto en marcha un nuevo protocolo, en el marco del estado de alarma y de la especial situación sanitaria provocada por la pandemia del Covid-19, para extremar sus medidas de seguridad para la protección de los pacientes y el personal sanitario durante el abordaje de todo tipo de tratamientos.
La jefa del Servicio de Radioterapia, María Isabel Ramos, ha explicado que la actividad de su servicio no se ha visto paralizada por la importancia que tiene en la curación de los procesos oncológicos la continuidad de sus tratamientos, dado que "existen unos plazos óptimos en los que se obtiene el rendimiento buscado y saltarse estos plazos haría que se perdiera la indicación del tratamiento", incide.
En este sentido, la doctora María Isabel Ramos señala que se han tomado todas las medidas de seguridad indicadas por el Ministerio de Sanidad y las sociedades científicas para poder garantizar la protección tanto de los pacientes oncológicos, considerados población de riesgo, como del personal que los atiende.
Así, se ha cambiado el sistema de citas, de modo que el paciente nuevo es visto en consulta presencial y en esa misma visita se le realiza ya el TAC de planificación para evitarle desplazamientos innecesarios; y se ha ampliado el tiempo asignado por paciente para evitar que se acumulen en las salas de espera.
También se han cambiado los esquemas de tratamiento de manera que, siempre que se pueda, se intente hacer tratamientos hipofraccionados. Esto es, que se concentran las dosis de los tratamientos en un menor número de sesiones para que tenga que acudir así menos veces al centro hospitalario.
Igualmente, el personal sanitario utiliza pantallas protectoras, mascarillas y batas desechables, así como se les pide también a los pacientes el uso de mascarillas, higiene de manos frecuentes, limpieza exhaustiva con soluciones hidroalcohólicas, solo un acompañante y mantener las distancias de seguridad.
Por parte del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, asimismo, se cuida especialmente la desinfección de zonas comunes o de las superficies de las zonas de tratamiento, al tiempo que se mantiene un control constante en la aparición de posibles síntomas en cualquiera de los pacientes sometidos a tratamiento.