El hospital Recoletas Campo Grande (Valladolid) ha puesto en marcha un programa de cribado para detectar cardiopatías congénitas severas en todos los recién nacidos. Se trata de un método no doloroso ni molesto que consiste en determinar la oxigenación de la sangre del recién nacido en las primeras horas de vida con un saturómetro que se pone en la mano y en el pie.
Fachada del hospital. |
Este cribado permite sospechar o descartar la presencia de malformaciones cardiacas severas en el neonato, así como incrementar el porcentaje de recién nacidos que pueden ser susceptibles de recibir un tratamiento adecuado y precoz ante estas patologías, lo que conlleva una mayor supervivencia y menor número de secuelas.
Los bebés afectados por una cardiopatía congénita pueden presentar síntomas desde los primeros días de vida aunque, en ocasiones, la cardiopatía no se manifiesta desde el inicio, por ese motivo es frecuente encontrar niños asintomáticos. La incidencia de estas patologías es de dos casos por cada 1.000 nacimientos pero aún no se ha podido determinar cuáles son las causas (en la mayoría de los casos no se consideran hereditarias ni están asociadas a factores de riesgo conocidos).
Debido a su gravedad, las cardiopatías congénitas precisan de un diagnóstico muy precoz, idealmente antes del comienzo de los síntomas clínicos, que normalmente preceden al colapso circulatorio o muerte del recién nacido. Por ello, es fundamental su diagnóstico prenatal y
posnatal. Sin embargo, las herramientas actuales (la ecocardiografía fetal y las exploraciones físicas rutinarias de la madre durante el embarazo y del recién nacido) sólo consiguen detectar aproximadamente dos tercios de los casos.
En este sentido, “el cribado neonatal de cardiopatías congénitas severas ha demostrado ser un método eficaz, no invasivo, bien tolerado, para detectar precozmente estas malformaciones en recién nacidos asintomáticos y afectos de estas patologías en las primeras horas después del nacimiento”, aseguran desde el hospital.
Con la puesta en marcha de este programa, el Hospital Recoletas Campo Grande se sitúa a nivel de otros grandes hospitales en España, y otros países de Europa, Estados Unidos y China donde también se realiza esta prueba con muy buenos resultados.