En su compromiso por la innovación y la transformación digital de la atención sanitaria, el grupo sanitario Ribera ha recibido el apoyo del programa europeo COVID-X para realizar un estudio de investigación sobre la utilidad clínica del proyecto de dermatología digital implantado en el Hospital Universitario de Torrejón. Se trata de una herramienta desarrollada en colaboración con la startup Legit.Health, basada en Inteligencia Artificial (IA) para el seguimiento en remoto de patologías de la piel.
Gracias a la inclusión del proyecto en COVID-X, la unidad del centro está llevando a cabo un estudio para ampliar las afecciones tratadas a través de la herramienta y extender su uso a un mayor volumen de pacientes. El objetivo es ofrecer un mejor seguimiento y una atención personalizada sin congestionar los servicios sanitarios presenciales. Todo ello, avalado y supervisado por un programa europeo de transformación digital que fomenta la colaboración entre startups de eHealth y organizaciones sanitarias, cuyo propósito es impulsar un programa ágil de validación end-to-end de nuevas tecnologías.
Ribera está explorando la posibilidad de implementar esta herramienta en otros centros del grupo, además del proyecto que se está llevando a cabo en el Hospital Universitario de Torrejón. El grupo sanitario, de la mano del Hospital Universitario del Vinalopó, también está estudiando la aplicación de esta tecnología para el seguimiento de otras patologías como las úlceras por presión, gracias al diseño de nuevos algoritmos predictivos como los desarrollados por Futurs, su división tecnológica.
¿En qué consiste el proyecto de dermatología digital?
Se trata de un dispositivo médico digital que ayuda al Servicio de Dermatología a realizar un seguimiento detallado y objetivo en el proceso de evaluación de la piel, gracias al análisis automático de imágenes y al autorellenado de escalas de medición. Gracias a la herramienta, los pacientes pueden ser evaluados desde casa, se puede controlar a los pacientes crónicos sin generar desplazamientos innecesarios de los pacientes y optimizando el tiempo en consulta con casos que así lo requieran.
La herramienta es de fácil uso; basta con realizar una fotografía de la lesión y enviarla a través de la plataforma, que cuenta con algoritmos de IA para analizar la imagen. Un proceso que puede culminarse en cuestión de minutos. El sistema mide la calidad de la imagen a través del algoritmo y analiza la variación entre una imagen y otra, para valorar la evolución. Gracias a esta tecnología, además, los dermatólogos pueden recibir alertas sobre empeoramiento o casos prioritarios. En funcionamiento desde el año 2020, esta herramienta está disponible para el seguimiento de pacientes crónicos con patologías como psoriasis, acné, dermatitis atópica, hidradenitis (enfermedad cutánea crónica y autoinflamatoria, con brotes de intensidad variable, caracterizada por la presencia de forúnculos), urticaria o afectaciones dermatológicas relacionadas con el COVID-19 que requieren un seguimiento continuado por parte del dermatólogo.
Utilidad clínica del proyecto
La aplicación permite realizar un seguimiento digital y continuo de pacientes diagnosticados con enfermedades dermatológicas crónicas. Gracias a que la herramienta proporciona una medición mucho más precisa y constante sobre la evolución de la lesión, los profesionales pueden evaluar y monitorizar el progreso de las afecciones para estar informados en todo momento del empeoramiento o mejoría de ellas, sin necesidad de que el paciente acuda a Urgencias o a consulta.
El equipo médico asegura en el estudio que la plataforma les permite realizar un seguimiento exhaustivo en remoto gracias a las imágenes y alertas, así como priorizar los pacientes que sufren algún brote. Además, consideran que la aplicación les ha ayudado a optimizar su tiempo en función de las necesidades de cada paciente y a obtener más información sobre su estado. En cuanto a los pacientes, afirman que es una herramienta muy útil y que, junto a la atención de su dermatólogo mediante las llamadas telefónicas y las consultas presenciales, se sienten muy acompañados. Aseguran que les aporta tranquilidad porque supone un canal de comunicación médico-paciente sin la necesidad de realizar desplazamientos innecesarios al hospital.